El dinamismo y adaptación del sector, así como su creciento y capacidad de respuesta a la demanda han sido algunas de las características que hoy ha destacado Francisco José Arregui, presidente de UCEAC, al presentar la Memoria Social del Seguro Catalán. La publicación, que recoge los retornos a la sociedad del negocio asegurador en Cataluña, señala que la facturación a lo largo de 2006 en esa autonomía alcanzó 10.600 millones.
Esta cifra se traduce en una media de 1.514 euros anuales habitante, un 30% más que la media invertida en seguros en todo el territorio nacional y, en su conjunto, la actividad aseguradora en Cataluña supone casi el 6% del PIB del territorio.
Destaca especialmente el ramo de los seguros de vida, en el que las tasas de inversión en pras habitante son del entorno de los 840 euros, lo que supone ejemplo más ahorro que un inversor alemán y prácticamente lo mismo que un italiano. Por otra parte, y en lo que se refiere a los seguros de falleciento, en Cataluña se contrata como media indemnizaciones ligeramente enca de los 53.000 euros.
En cuanto a los seguros de salud, más del 25% de los barceloneses tienen contratada una póliza privada, tasa que está en torno al 20% en las otras tres provincias catalanas. En el conjunto de España uno de cada cinco asegurados de salud son catalanes.
En cuanto a la satisfacción de los ciudadanos, la mayoría prefiere tener un seguro de hogar antes que un coche, un ordenador o un televisor de plasma. Esta acogida se debe a que, según UCEAC, los catalanes tienen una alta valoración de la calidad de respuesta del seguro, ya que el seguro en Cataluña actúa cada 70 segundos en un hogar asegurado, que es la frecuencia con la que se produce un siniestro en la vivienda, siendo los más habituales los daños agua, goteras principalmente, y la rotura de cristales.
