El Real Automóvil Club Español ha llevado a cabo un estudio sobre la velocidad media de los conductores en ámbito urbano en el marco de la reciente entrada en vigor de la reforma del Código Penal en materia de seguridad vial. Para esto, ha analizado, durante una semana, las velocidades en Valencia, Madrid y Málaga: la conclusión es que el 56% de los vehículos que circulan ciudad superan la velocidad permitida, sobre todo durante las noches del fin de semana. De todos, los que más infringen la norma son los valencianos: su velocidad media es de 61 kilómetros hora. Durante esta semana, en la que los dispositivos de análisis funcionaron durante las 24 horas del día, se recogieron 931 infracciones que, con el nuevo Código, podrían haber constituido delito contra la seguridad en el tráfico. Este es otro punto en el que Valencia destaca negativamente: en esta ciudad se produce un 76% de infracciones, mientras que en Málaga se ha descubierto un 49%. La sorpresa la constituye Madrid, ya que en la capital es donde menos infracciones se cometen, un 39%.
Analizando la muestra tipo de vehículo, el RACE afirma que el 61% de los vehículos son turismos, que alcanzan una velocidad media de 51,6 kilómetros hora; el 22% son motocicletas, cuya velocidad media es de 56 kilómetros hora. Además, el 14% de los vehículos son camiones ligeros y el 3% autobuses o autocares.
En total, el informe afirma que se han cometido 289.286 infracciones graves y muy graves, que podrían suponer sanciones valor de 38,5 millones de euros. De todas ellas, 33.605 llevarían aparejada la pérdida de 33.605 puntos, lo que constituye un 10% de los puntos perdidos en el prer año de vigencia del permiso, es decir, entre julio de 2006 y julio de 2007.
Además, en lo que se refiere a la reciente reforma del Código Penal, se han registrado 931 delitos contra la seguridad del tráfico, ya que ha habido vehículos que han alcanzado la velocidad de 193 kilómetros hora en zonas litadas a 50 kilómetros hora, lo que constituye un delito contra la seguridad del tráfico y puede llevar aparejada pena de cárcel.
Junto con las conclusiones de este estudio, RACE ha emitido una serie de peticiones a la Administración, basadas en una mayor dotación de recursos a jueces y fiscales, como últo eslabón de la cadena de aplicación de la norma; mejor dotación de efectivos de control de tráfico, que corrijan malas conductas y puedan identificar al autor de la infracción en el momento de cometerla, y mejor formación a determinados colectivos, como los inmigrantes, que desconocen la realidad del tráfico en España.
