Con el inicio del nuevo año han entrado en vigor los descuentos en el puesto de matriculación para los coches cuyas emisiones no superen los 120 gramos de CO2 kilómetro recorrido, algo que varios fabricantes han aprovechado para potenciar las ventas de este tipo de vehículos. Además, las marcas cuyas emisiones superen necesariamente este límite (las que fabrican coches más potentes, como todoterrenos) han comenzado ha efectuar ofertas y descuentos para compensar la subida del puesto de matriculación. Por ejemplo, la compañía Land Rover ya ha anunciado que varios de sus vehículos 4×4 tendrán descuentos de entre 2.100 y 3.120 euros, puestos incluidos. La compañía es consciente de que, con vehículos que pagarán hasta un 14,75% de su precio en concepto de puesto de matriculación, algún aliciente tiene que dar a sus conductores.
Aunque no todos sus coches pagarán más contaminar: modelos como el Defender Comercial de 122 cv. y el Discovery 3Pro no pagarán ni un euro gracias a sus bajas emisiones. En el caso opuesto, algunos vehículos de la casa, con emisiones de entre 224 y 376 gramos de CO2 kilómetro recorrido, son los más contaminantes y los que más pagarán.
Otra de las marcas que ha empezado a anunciar los descuentos de sus vehículos es Ford, que ya ha afirmado que el 80% de su gama se verá beneficiada los descuentos fiscales que tienen las emisiones inferiores a 120 gramos kilómetro. Según la marca del óvalo, el descuento puede ser superior a 1.000 euros en algunos casos, como el Focus Trend, con motor 1.6 TDCi de 109 caballos, que ahora cuesta 1.015 euros menos.
Esto se debe a la introducción de nuevos motores Duratorq 1.6 TDCi y Duratorq 1.4 TDCi, que emiten menos de 120 gramos kilómetro recorrido, lo que ahorrarán a los conductores la totalidad del puesto de matriculación. Además, la marca ha desarrollado los motores Duratorq 2.0 TDCi, 1.8 TDCi y 1.6i, cuyas emisiones quedan debajo de 160 gramos kilómetro, es decir, pagarán como puesto de matriculación sólo un 4,75% de su precio. Y todo esto, afirma Ford, sin perder ninguna de sus prestaciones.
Los beneficios fiscales para los coches menos contaminantes se han convertido en un valor en alza para promocionar los vehículos propios, pero ¿qué ocurrirá en un futuro con los coches más potentes, como los 4×4? ¿Será suficiente un descuento de 1.000 euros sobre el precio total del coche para disuadir a los amantes de la velocidad y los grandes coches?
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