El Ministerio de Sanidad, en colaboración con la compañía Microsoft, ha creado un robot, que, a través de Windows Live Messenger, pretende informar a los jóvenes de entre 12 y 17 años sobre cuestiones relacionadas con las enfermedades de transmisión sexual y el consumo de alcohol. Sin embargo, en la práctica Robin no es tan accesible como sus creadores afirman. Tras agregar al Messenger el contacto [email protected] ya podemos empezar a plantearle dudas, según ha asegurado el ministro de Sanidad, Bernat Soria, que ha presentado el proyecto esta mañana, de forma completamente anóna y en total intidad, lo que paliará la vergüenza que da a los adolescentes preguntar sobre sus cuestiones más íntas. Otra cosa es que el robot responda de forma coherente.
Según han asegurado los padrinos de Robin, la presidenta de Microsoft Ibérica, Rosa García, y el propio ministro de Sanidad, el robot está preparado para contestar cerca de 800 preguntas abiertas; es decir, el adolescente no tiene que formular la pregunta de una forma concreta para que Robin la entienda, sino que es capaz de responder siempre y cuando la pregunta esté correctamente redactada (es decir, pese a estar dirigido a jóvenes de entre 12 y 17 años no admite las tan corrientes abreviaturas). Este proyecto podría haberse convertido en una magnífica otunidad para ilustrar a los jóvenes sobre los perjuicios de combinar alcohol y conducción, otunidad que se ha perdido.
Las respuestas ‘Necesito algo de tiempo para pensar acerca de ello. Por favor, pregúntame más tarde' y ‘Lo siento, mis circuitos están muy ocupados ahora. Por favor, pregúntame más tarde' son de lo más comunes cuando se intenta preguntar acerca de los límites legales de alcohol en sangre durante la conducción o hasta qué punto afecta el alcohol a la concentración o a los sentidos.
Por otro lado, Robin puede activar una ventana lateral en la que ofrece información complementaria sobre el objeto de consulta, que, sin embargo, no funciona en la mayor parte de la ocasiones. De hecho, para conseguir respuestas claras es necesario introducir preguntas muy concisas, ya que, frecuentemente, pueden ocurrir cosas como preguntar a Robin acerca de la resaca y recibir una respuesta relacionada con el aborto.
En la rueda de prensa, Soria ha repetido en varias ocasiones que el robot busca informar y moralizar a los jóvenes, lo que en ningún caso hará juicios de valor acerca de las cuestiones sobre las que se preguntan. Quizá este motivo el personaje no contesta nunca abiertamente sobre si es o no bueno beber y conducir.
En definitiva, nos encontramos antes una herramienta con un potencial enorme, un paso más en el acercamiento de las instituciones a los jóvenes, pero con numerosas aristas pulir. Es de esperar que, cuando, como el ministro ha afirmado esta mañana, se incluyan respuestas sobre prevención del consumo de drogas y de tabaquismo, el sistema haya conseguido ofrecer respuestas más reales y cercanas al lenguaje de la juventud.
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