MÉXICO D.F (23/01/08) ‘La guerra contra Proceso'. Así titula el periodista Daniel Lizárraga el veto que la Presidencia le ha puesto a la revista Proceso, en donde su periodista lleva ya 10 meses sin poder estar acreditados en las giras del presidente. El 7 de marzo del 2007 fue la últa vez que el periodista Daniel Lizárraga, de Proceso, pudo asistir invitado a una gira presidencia de Los Pinos, en la capital del país, según informa el Centro de Periodismo y Etica Pública (CEPET). Y es que desde entonces, no consiguen estar acreditados a las giras del mandatario. A pesar de solicitar una explicación oficial al coordinador de la Comunicación Social de Presidencia, Maxiliano Cortázar, la revista no ha obtenido respuesta.
Sin embargo, Proceso cree conocer la supuesta causa de su rechazo. El 15 de marzo, mientras los reteros esperaban el autobús en las afueras del Palacio Nacional, Cortázar emprendió contra el periodista de la revista toda una serie de críticas la línea editorial seguida en Proceso y alguna de sus informaciones, concretamente a aquella en que se puso en duda la eficacia de los operativos contra el narcotráfico.
Desde entonces, el periodista de Proceso ha dejado de ser invitado a la gira presidencia. Los reteros que cubren la presidencia en México deben estar acreditados y todos los medios tantes tienen un espacio en el avión que transta a los periodistas, sin cargo alguno para sus medios, apunta CEPET. En viajes al extranjero los medios de comunicación cubren habitualmente el costo del transte aéreo, hospedaje y transte terrestre.
De hecho, no sólo reciben restricciones en materia de acreditaciones, tampoco se les conceden entrevistas ni otro tipo de información. La revista denuncia que la única forma que tiene para acceder a la información presidencial es a través del Instituto de Acceso a la Información.
