Atajar la inseguridad vial es una acción que se debe llevar a cabo desde la base: la educación es la mejor forma de concienciar a los futuros conductores sobre las actitudes más correctas al volante. Éste es el pilar de ‘PEERDrive Clean!', un proyecto europeo al que se han sumado las autoescuelas menorquinas. La formación de los futuros conductores incluirá en estos centros la visita de jóvenes técnicos que mantendrán con ellos ‘charlas muy informales' sobre seguridad vial, ejemplo, para debatir alternativas para salir de noche y no incurrir en conductas de riesgo al volante.
Según los responsables de la iniciativa ‘el que hablará en la autoescuela es un igual, un joven que tiene las mismas aspiraciones y frustraciones que otro que se está sacando el carné, lo tanto le es más cercano. Así, el propio grupo buscará las soluciones y se percibirá el riesgo como mayor'.










