Unas 4.000 personas se han manifestado en París contra la reforma audiovisual de Nicolas Sarkozy con pancartas en las que se podría leer: ‘Por un audiovisual público ambicioso y pluralista'.
El cortejo, disuelto sin incidentes, ha servido de respaldo en la calle (de la avenida de Marceau a los Campos Elíseos, muy cerca del palacio presidencial) a la huelga de 24 horas convocada la intersindical de los grupos públicos France Télévision y Radio France, de Radio France International (RFI) y de TV5 Monde.
La movilización tiene un precedente en 1974, cuando se desmanteló ley la Oficina de Radiodifusión Televisión Francesa (ORTF), que reunía a todas las cadenas y radios públicas. La huelga ha perturbado la programación regular de la docena de cadenas y emisoras concernidas, entre ellas France 2, France 3, France Culture, France Info, RFI y del canal francófono internacional TV5 Monde.
Dada la fuerte movilización, los sindicatos del audiovisual público, SNJ, CGT, CFDT Médias y UNSA, recibidos ayer en el Elíseo sin obtener las garantías requeridas de continuidad, financiación y pluralismo, han rechazado la oferta de reunirse con la ministra de Cultura y Comunicación, Christine Albanel. "Reclamamos audiencia con Nicolás Sarkozy, como los taxistas", ha exigido un representante sindical.
La huelga contra la supresión de la publicidad en las televisiones y emisoras públicas y contra la reforma del audiovisual exterior, que Sarkozy anunció el pasado 8 de enero, para sorpresa incluso de sus ministros y colaboradores más próxos, ha sido seguida masivamente, entre más del 60% y el 70%, según diversos medios.La protesta ha reunido a los sindicatos de France Télévision (France 2, France 3, France 4, France 5, RFO); Radio France (France Inter, France Info, France Culture, France Musique, Fip, Le Mouv') así como de RFI y de TV5 Monde.
Como hiciese hoy la ministra Albanel en declaraciones al canal privado de información continúa LCI, filial de TF1, el jefe de Estado prometió equilibrar "euro euro" las cuentas, pero nadie avanzó aún un plan concreto de acción, aunque sí varias pistas.
La principal es la de poner una pequeña tasa a los operadores de telecomunicaciones y servidores de intet, a las ventas de televisores, ordenadores personales y teléfonos móviles, así como a las cadenas privadas, encabezadas TF1, prera gran beneficiada de la idea presidencial de suprir la publicidad en los medios públicos.
