La ceremonia de los Oscar no sólo es el evento más tante para industria del cine, también lo es para las grandes marcas publicitarias que luchan alzarse con un hueco en tan prestigiosa noche. MasterCard, Pepsi o General Motors son algunas de los habituales de la alfombra roja. A pesar de que un spot de 30 segundos durante la gran cita del cine supone 1,6 millones de dólares, siempre hay marcas dispuestas a pagarlo. General Motors, Pepsico, American Express, JC Penney o L'Oreal son algunas de los principales anunciantes del certamen más glamouroso del planeta, con una inversión estada de 300 millones de dólares durante los últos diez años.
En este sentido, durante la últa década, el precio de estos spots ha aumentado un 75%, alcanzando 1,67 millones de dólares en 2007. Pero mientras los anunciantes rivalizaban incluir sus spots en los intermedios de la gala, películas de bajo presupuesto y poco conocidas como ‘Juno' y producciones algo más sonadas como ‘No es país para viejos' rezaban para que los guionistas suspendieran su huelga.
Así, MasterCard sépto año consecutivo, hizo acto de presencia en los intermedios del festival, llegando a emitir hasta tres spots que promocionaron las ‘experiencias que no tienen precio'. Por otra parte, la comida congelada Bertolli lanzaba un reto en una de las pausas de la gala e instaba a preparar una cena romántica, con velas y la comida congelada de la marca.
El sector de la belleza tampoco se quedó atrás y tuvo su momento de gloria con Dove, que aprovechó la ocasión para enfrentar a los dos spots domésticos finalistas de una promoción en la que se instaba a las mujeres a crear sus propios anuncios para ‘capturar el sentiento del lujo del día a día cuando se pasa la ducha'.
Sin embargo, la Academia aún está lejos de las cifras detentadas el otro gran evento americano, la Superbowl, cuyas tarifas prácticamente duplican las del tío Óscar (2,7 millones 30 segundos). Los anunciantes, acostumbrados a invertir en ambos sotes, han preferido diversificar su inversión en los últos años: de esta manera, en 2003 siete anunciantes se promocionaban tanto en los Oscar como en el Supertazón, una cifra que ha ido cayendo progresivamente hasta los cuatro que lo hicieron en 2007.
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