El sector farmacéutico reclama la necesidad de alcanzar un acuerdo europeo para homogeneizar la trazabilidad y estandarizar los etiquetados de los productos, con el objetivo de mejorar el funcionamiento de la cadena de suministro y garantizar la máxa seguridad en la administración de medicamentos al paciente. Para ello, la tecnología RFID se postula como la más apropiada para responder a sus necesidades específicas.
Así se ha puesto de manifiesto durante un desayuno tecnológico sobre el sector farmacéutico organizado Fundetec (Fundación para el Desarrollo Infotecnológico de Empresas y Sociedad) y el Centro Español de Logística (CEL), celebrado en Madrid, al que han asistido representantes de todos los agentes sectoriales: desde el laboratorio hasta la oficina de farmacia, pasando los mayoristas, los operadores logísticos y los hospitales.
En el transcurso del mismo, la representante del área de farmacia del hospital madrileño Gregorio Marañón ha explicado el tiempo que se pierde en un centro hospitalario de grandes densiones como éste tener que introducir a mano los datos de lote y caducidad en los estuches y monodosis de los medicamentos a administrar a sus pacientes, una vez entregados el distribuidor. En este sentido, ha recordado que la manipulación humana puede derivar en graves errores en un entorno como el hospitalario, y ha insistido en la necesidad de codificar las monodosis de los medicamentos, al menos los que son considerados de alto riesgo.
Según se ha puesto de relieve, la tecnología RFID (identificación radiofrecuencia), que ya ha demostrado su eficacia en otros entornos de la industria, permitiría catalogar un pedido completo de medicamentos con tan sólo pasarlos un arco lector, lo que permitiría tantes ahorros en tiempo y personal, además de garantizar la seguridad del paciente y la trazabilidad de los medicamentos.
Por tanto, el hecho de no abordar la trazabilidad en el sector no se debe a la carencia de tecnología adecuada, sino al conflicto de intereses entre los diferentes agentes plicados en la cadena farmacéutica. Y uno de los principales obstáculos son los costes que requiere la integración de la tecnología, derivados de la necesaria inversión tecnológica y del reetiquetado de los medicamentos.
En este sentido, Alfonso Arbaiza, director general de Fundetec, ha destacado la tancia de no considerar esos desembolsos como un coste, sino como una inversión de futuro que va a splificar el trabajo diario y a mejorar el funcionamiento del sector, además de generar ahorros procionales a esos costes.
Por su parte, Ramón García, director de Innovación y Proyectos del CEL, ha apuntado que existe un problema de asetría: El que tendría que asumir la iniciativa el laboratorio sería tal vez el menos favorecido la inversión realizada, mientras que los que más ahorrarían serían los que no tendrían que hacer el desembolso económico.
Por eso, los asistentes al desayuno consideran necesario que exista una coordinación de todos los agentes del sector farmacéutico que favorezca la identificación de sus diferentes necesidades y su interés común, y esa coordinación debería partir del Ministerio de Sanidad y de la Ley del Medicamento, como ha destacado la representante de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE). Además, Fundetec y CEL consideran que este desayuno podría ser la base para constituir un foro de encuentro entre los diversos agentes de la cadena de suministro farmacéutico para tratar de alcanzar un acuerdo de mínos para la mejora de la eficiencia del proceso.









