El presidente de la República francesa, Nicolás Sarkozy, está cabreado…y como no lo puede pagar con Carla Bruni (¡quién podría!), ha decidido prescindir de su tavoz, David Martinon. Su destino: el consulado de alguna ciudad norteamericana…
El varapalo sufrido la derecha gala durante las últas elecciones municipales ha hecho recapacitar a su líder, el otrora ministro del interior y hoy presidente, Nicolás Sarkozy. El concubino de la polifacética modelo y cantante italiana Carla Bruni ha decidido suprir un cargo que él mismo creó cuando accedió al palacio del Elíseo: el de tavoz.
David Martinon, hombre de confianza del líder francés, abandona de esta manera un cargo hecho a agen y semejanza del tradicional tavoz de la Casa Blanca, un cargo que durante el mandato Bush se ha convertido en una auténtica patata caliente.
De esta manera, el consejero de prensa y comunicación, Franck Louvrier, sale reforzado: a partir de ahora se ocupará de lo ‘cotidiano' y la ‘responsabilidad de la comunicación'.










