LA HABANA (25/03/08) El ex mandatario cubano Fidel Castro ha escrito nuevamente en Granma para abordar en esta ocasión, a través de dos cartas, los últos aconteceres del ámbito internacional. En la segunda de éstas, se dirige especialmente a los 75 cubanos que fueron arrestados y que permanecen en las cárceles cubanas durante la conocida como ‘Pravera Negra' y que el 18 de marzo hicieron cinco años desde su arresto. A ellos se refiere como ‘vendepatrias' ‘pagados el gobierno de Estados Unidos'.
Muchos de estos 75 prisioneros cubanos eran periodistas. De hecho, hoy hoy hay un total de 22 informadores encarcelados en la isla cubana. Así lo ha asegurado Carlos Lauria, coordinador para las Américas del Comité para la Protección de los Periodistas, (CPJ sus siglas en inglés). Los cinco años de sus arrestos ha sido uno de los temas abordados Fidel Castro en la últa de las cartas enviadas al diario Granma, donde de manera casi rutinaria escribe sus reflexiones sobre la últa actualidad del ámbito internacional y de Cuba y Estados Unidos, es especial.
Y es que según asegura en la segunda de las cartas enviadas el 24 de marzo, estos 75 encarcelados ‘violan las leyes del país y comparten la tesis de que este oscuro rincón del mundo debe ser barrido del mapa'.
Miles de organizaciones e instituciones protestaron durante la últa semana contra estos encarcelamientos permanentes solicitando su liberación. Bautizada como ‘Pravera Negra', el ex mandatario cubano considera que es un ‘término de connotación racista'. De hecho y de forma irónica asegura que podría ser llamada la ‘Pravera Blanca'.
Los detenidos se encuentran en situaciones miserables, sin recibir los medicamentos necesarios según las enfermedades que terminan padeciendo las condiciones insalubres. Así lo han relatado diversos ex presos cubanos que actualmente se encuentran en Madrid, España, a donde han tenido que dirigirse tras salir de la prisión ya que allí no se les permitía permanecer libres. De esta manera nos lo expresas el ex preso y periodista Alejandro González Raga, que forma parte de los últos siete disidentes liberados. Raga ‘hubiera querido ser libre en Cuba'.
Fidel Castro se defiende de las numerosas acusaciones asegurando que contra lo afirmado estos presos, ninguno de ‘los mercenarios fue torturado ni privado de abogado o juicio'. Por otro lado, afirma que estos detenidos ‘tienen derecho a visitas, acceso al pabellón familiar y demás prerrogativas legales como todos los reclusos', y resalta que ‘si en algún momento la salud lo demanda, son puestos en libertad'. Un hecho que no ha sido relatado así muchos de los ex presos, quienes aseguran que en las cárceles cubanas hay todavía presos en deplorables estados de salud.
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