Un nuevo modelo de ITV (Inspección Técnica Obligatoria) realizada los propios concesionarios, separando, eso sí, las labores de peritaje y de reparación, es lo que propone la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto). De esta forma, la asociación sale al paso de las declaraciones del presidente de la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECAITV), Julio Tejedor, que ya había mostrado su rechazo este sistema, vigente en Alemania.
Por su parte, el presidente de Faconauto, Antonio RomeroHaupold, ha defendido su posición reivindicando que el modelo actual es ‘ineficaz' y ‘perjudica al consumidor', ya que dos de cada 10 vehículos que circulan las carreteras españolas no se ha sometido a la ITV, además de que el plazo medio entre inspección y reparación es de unos 15 días, aproxadamente.
Por este motivo, la organización de RomeroHaupold está a favor de la entrada en el servicio de ITVs de los concesionarios oficiales que hay en España (unos 3.500 en total), lo que permitiría triplicar la capacidad actual y garantizar un servicio geográficamente más cercano al ciudadano, es decir, más cómodo e inmediato. Así, se conseguiría aumentar la calidad de la revisión e incentivar una mayor competitividad en sus precios.
Frente a las dudas de Tejedor acerca de un servicio mixto, expresadas mediante la convicción de que el servicio actual ‘funciona bien desde hace muchos años', Faconauto argumenta las bondades del sistema alemán, mixto y caracterizado una estricta separación entre inspección y reparación.
Así, de plantarse el nuevo modelo, la inspección sería realizada peritos independientes, que certificarían el estado del vehículo, mientras que la reparación sería realizada las organizaciones privadas autorizadas para ello o las instalaciones certificadas, como los concesionarios y los talleres.
