Dos días del debate de investidura y una cosa ha quedado clara: los políticos han apostado comenzar una legislatura tranquila, sin odios y ofreciendo pactos de Estado para sortear la actualidad política. ¿Es el fin de la crispación? Probablemente no, lo que sí es seguro es que los medios lloran esta decisión, ya que estos últos cuatro años, el aumento de sus tiradas ha estado en directa relación con el aumento de las hostilidades. El Mundo, ABC, la Razón y El País ven que este nuevo talante en nada les favorecerá para sortear la crisis del papel.
Los últos cuatro años de legislatura pasarán a la historia como uno de los más broncos desde el retorno de la democracia. Cuatro años en que no pasaba un día en que los dos partidos principales estuviesen enfrentados cualquier tema: Estatutos de autonomía, eta, economía, 11M, educación. Cualquier excusa era válida para enfrentarse en el Congreso, en mítines, pero sobre todo en los medios de comunicación. Y los medios sacaron tajada y lo rentabilizaron y ganaron audiencias y subieron ejemplares.
El Mundo y sus informaciones registraron las mismas audiencias históricas desde la crisis de los GAL, El País contestó con la misma munición y logró salir de una preocupante crisis de tirada. La Razón, apostando la crispación y las críticas al Ejecutivo está en sus datos más altos de difusión (rozando los 200.000 ejemplares) y ABC que se subió tarde al carro tras definir su crisis vital de posicionamiento ideológico ha logrado crecientos de dos dígitos desde el segundo semestre del año pasado, coincidiendo con la escalada de acusaciones entre PP y PSOE.
¿Conclusión? La crispación vende y mucho y para ello los medios necesitan unos políticos broncos dispuestos a descalificar al contrario sin miramientos. No obstante, al menos en el debate de investidura estos políticos parecen dar marcha atrás y tras ser castigados en las urnas (en el caso del PP) prefieren apostar, al menos desde el inicio la mesura. El PP ya lo ha demostrado desoyendo completamente la ‘carnaza' que El Mundo ha publicado estas últas dos semanas respecto del 11M y de las negociaciones con eta.
Y el PSOE ha ofrecido pactos al PP en todas las áreas más relevantes. Ni Rajoy, ni Zapatero parecen dispuesto seguir con este desgaste y han abierto la puerta a lo que hace unos meses parecía posible. ¿De qué hablarán los medios ahora? ¿Podrán seguir capeando la crisis del papel, ahora sin material para crispar? Sin políticos que agiten polémicas, ¿serán capaces de situar mediáticamente sus informaciones? Sólo el tiempo lo dirá.
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