Seis jornadas para el final de la Liga y han vuelto las medidas cautelares, las prohibiciones para entrar en los campos y la emisión de partidos de interés general duplicado. Como ya os contamos hace muchos meses, la guerra del fútbol es mucho más que una disputa entre dos empresas con derechos detivos. Es un negocio millonario que involucra a decenas de entidades que también quieren sacar tajada. Entidades que se han hartado y comienzan a desmarcarse de este ‘duopolio' pidiendo explicaciones a la Justicia los daños colaterales.
La semana pasada ya os contábamos que la Comisión Nacional de la Competencia, decidía expedientar a todos los operadores y clubes plicados prácticas restrictivas de los derechos audiovisuales del fútbol. El expediente no sólo afectaba a Mediapro, y Sogecable sino que además a TVC Multedia, las autonómicas TV3, Canal 9 y Telemadrid, la entidad financiera Caja Madrid y 38 clubes de Prera y Segunda división del fútbol español.
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Pero este fin de semana se han sumado dos nuevos requerientos. La dirección de Televisión Valenciana (TVV) decidió el sábado no emitir ningún partido de fútbol en abierto ‘como consecuencia de la 'guerra del fútbol'' entre Audiovisual St y Mediapro. La pública valenciana aseguró además que ejercerá acciones legales los daños y perjuicios que le ocasiona ese ‘enfrentamiento'.
Lo destacable de este anuncio es que Canal Nou es una de las autonómicas que han firmado acuerdos con Mediapro para emitir semanalmente el mismo partido que la Sexta, un acuerdo silar al que existe con TV3, y otras cinco cadenas regionales. Aparentemente Valencia se desmarca de la guerra del fútbol, aunque no sabemos si con esto retira su apoyo plícito a Mediapro.
Pero no es lo único. Audiovisual St ha sido condenada a pagar 1,7 millones de euros a la LFP que ésta no pagó los servicios de asesoramiento sobre el formato y la estructura de la Copa del Rey para su explotación televisiva. Según un tavoz de Audiovisual St citado EFE, se trata de ‘una deuda reconocida que no se ha pagado deliberadamente los continuos perjuicios causados la LFP al modificar semana tras semana los horarios de los partidos programados'.
Todo esto se enmarca en los últos fallos en contra de Prisa que ha debido rectificar una decena de informaciones contra Mediapro, la Sexta y sus ejecutivos, al tiempo que Mediapro ha sido pedido de ingresar y de emitir una decena de partidos que incluso habían sido programados la Liga de Fútbol Profesional. ¿Qué pasará a partir del próxo curso?
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