Los diecisiete ministros que compondrán el segundo ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero ya han prometido sus cargos, tras lo cual han aprovechado para ir conociendo los entresijos de su nuevas responsabilidades. La mayoría son veteranos, y tienen sus propios equipos, mientras que muchos de los noveles aún andan a la caza de un Dircom que les guíe en esta nueva aventura…
Ser Ministro es una gran responsabilidad, de ahí que sea necesario rodearse de un equipo de asesores de confianza capaces de guiar al político en cada una de sus actuaciones. En este sentido, la figura del Dircom resulta fundamental, debido precisamente a la exposición mediática propia del cargo, una carga que no todos están preparados para sotar.
Por ello, salvo casos excepcionales (Magdalena Álvarez batió records durante la anterior legislatura) es muy difícil ver a un político cambiar de Dircom cuando accede a un nuevo cargo, debido a la especial relación de complicidad que surge entre ambos. Salvo sorpresa de últa hora, nombres como los de Victoria García (Justicia), José Lino Ventosinos (Medio Ambiente, Medio Rural y Marino), Fáta Rojas (Educación, Política Social y Detes), Germán Rodríguez Sánchez (Defensa), Manuel Cacho (Asuntos Exteriores y Cooperación), Lourdes Camino (Interior), José María Noguerol (Fomento), Juan Carlos Martínez (Sanidad y Consumo), Diana Lara (Cultura), María Jesús Luengo (Economía) y Ángel Puerta (Vicepresidencia prera) seguirán siendo las manos derechas de sus respectivos ministros.
Pero, ¿qué pasa con los novatos? En este apartado, cualquier cosa es posible. De los cinco ministros noveles, tres de ellos trabajaban directamente con un responsable de comunicación en sus anteriores ocupaciones (Corbacho, Garmendia y Aido), mientras que a los dos restantes (Sebastián y Corredor) se les desconocen manos derechas.
Celestino Corbacho, Ministro de Trabajo e Inmigración, contaba con un nutrido equipo en el Ayuntamiento de L'Hospitalet (Manel Fran Trench coordinador del servicio de Comunicación, Manuel Pérez jefe de gabinete de alcaldía y Yolanda Martínez jefa de prensa); Cristina Garmendia (Ciencia e Innovación) hacía lo propio en el ámbito privado (era Consejera Delegada Genetrix, una empresa de biotecnología cuyo Dircom es Juan Sebastián Ruiz), mientras que Bibiana Aido contaba con Pepa López al frente de la Comunicación de la Agencia Andaluza para el desarrollo del Flamenco, su últa ocupación antes de ser nombrada Ministra de Igualdad.
Entre los que adolecen de dircoms encontramos a Miguel Sebastián Industria, Turismo y Comercio y Beatriz Corredor Vivienda. El prero será recordado como el candidato puesto Rodríguez Zapatero para intentar derrocar a Alberto Ruiz Gallardón. Durante las últas elecciones municipales y autonómicas contó con Isabel Longhi como jefa de prensa, si bien parece poco probable que la responsable de la sección de Comunicación de El Mundo abandone segunda vez Unidad Editorial el político. Respecto a la actual concejala socialista en el Ayuntamiento de Madrid, destacar que su trayectoria anterior como registradora de la propiedad parece poco probable que tenga a una persona de confianza de cara a los medios de Comunicación.
De momento, todo son elucubraciones…pero, ¿ qué no pueden convertirse en realidad?
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