En la Tierra a domingo, diciembre 29, 2024

‘La escuela tiene que ser más activa’

javier_aranceta.jpg

Con el objetivo de poner una barrera que frene el creciente deterioro de la calidad de vida de las personas, nace el Observatorio de la Nutrición y Actividad Física. prpacientes entrevista al doctor Javier Aranceta quién, además de ser el presidente de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria, coordinará esta plataforma.

En España se esta que el 53% de la población padece sobrepeso y la prevalencia de obesidad se sitúa en un 14,5% en adultos y crece hasta un 14% en niños, según la últa Encuesta Nacional de la Salud del Ministerio de Sanidad.

¿Cuál es el principal motivo el que nace esta plataforma científica, el Observatorio de la Nutrición y Actividad Física?

Aunar esfuerzos desde una perspectiva multidisplinar, para así desenfundar el diagnostico y dar perspectivas de solución a los problemas más prevalentes de los profesionales.

¿Podría definir el presente y el futuro de la problemática de la obesidad y el sobrepeso en España?

El prer reto que se plantea el Observatorio es hacer una revisión y una valoración del tema de la obesidad en España, hacer una propuesta desde diferentes ópticas: la médica, la social y la institucional, entre otras. La obesidad, presente en España desde los años 80, es un problema que aumenta de manera exponencial y que, si no intentamos buscar soluciones a corto y medio plazo, esto se acabará convirtiendo en un panorama preocupante.

Esto no sólo repercute en los ciudadanos sino que a las consecuencias sociales habrá que añadir el coste sanitario que puede generar la sobrecarga asistencial. Si no hacemos algo, no sé si podremos asumirlo a largo plazo.

Soluciones ¿educación? desde niños sí, pero ¿estamos a tiempo de educar a los adultos?

Aquí hay varios frentes. El prero es prevenir y para ello tenemos que trabajar en los centros escolares de manera decidida. Es aquí donde hay que cambiar muchas cosas que todavía tenemos cogidas con alfileres. Uno es el programa de la actividad física que, más allá de la asignatura de gnasia, hay que propiciar que la escuela sea un lugar más activo: los recreos, todos los fundamentos de la actividad detiva extraescolar… Hay que propiciar programas que faciliten que los niños y los jóvenes sean más activos. En estos momentos la perspectiva es bastante praria, es un tema que está sin solucionar.

El segundo punto es el pacto alentario que tiene el marco escolar. Los comedores están sin regular convenientemente y en centros docentes, institutos y universidades hay máquinas expendedoras de bebidas refrescantes y alentos energéticos también sin regulación. No digo que no tenga que haber máquinas, pero de alentos que favorezcan la Salud, y no todo lo contrario. En todo esto hay que plicar a los padres y a los profesores; hay que desarrollar un proyecto nutricional, tanto para el colegio como para el domicilio y el entorno.

La segunda acción corresponde a las personas con sobrepeso, las que todavía no han desarrollado obesidad pero que están en fase de hacerlo si no se interviene. En estos momentos hablamos del 45% de la población, que no es una cantidad pequeña. Con este grupo tenemos que trabajar de manera intensiva para evitar que casi la mitad de ellos desarrolle obesidad en un futuro, y esto sólo se consigue favoreciendo la actividad física en el dete comunitario, con polidetivos y acciones en el barrio, favorecer el paseo… todo lo que sea gasto energético.

La obesidad es algo que se desarrolla a través de los años, no es algo que aparece en un mes, y hay que solucionarla de manera insistente. Las personas necesitan tiempo para vencer esta acumulación de grasa.

El tercer nivel de acción se tiene que concretar en las personas que desarrollan obesidad clínica. Para estas personas hay que habilitar unidades de obesidad, tanto en hospitales como en atención praria, que el tratamiento es complicado, necesita gente formada y un equipo multidisciplina: dietistas, nutricionistas, fisioterapeutas, psicólogos…

En estos momentos el 90% de los tratamientos fracasan, entendiendo como fracaso que el Paciente lo abandona, y luego vuelve, y luego vuelve a abandonar… y así está toda la vida.

Hay evidencia científica de que la obesidad es un problema estético que verdaderamente merma la autoesta y la relación de la personas con su entorno, favoreciendo la detección precoz de enfermedades crónicas que acortan la duración de la vida: diabetes, hipertensión, hipercolesterolemia, muerte infarto, ICTUS, algunos tipos de cáncer… Hablamos de problemas que aparecerían 20 años más tarde o no aparecerían nunca; lo tanto, el pacto económico y social y el pacto en el bienestar de la población es tantíso. Si seguos sin tomar una decisión consensuada y responsable nos encontraremos como en EEUU, donde un alto centaje de la población es obesa y donde están ya prácticamente desbordados.

Parece que siempre vamos detrás de EEUU, para lo bueno y para lo malo ¿nos da esto cierta ventaja ante esta problemática?

Nosotros tenemos un estilo de vida mediterráneo, con una dieta mediterránea, más seguridad en las calles para poder pasear, correr o andar en bici. Vivos en un medio ambiente favorable para buscar soluciones, sólo hace falta que los responsables sanitarios, los políticos y los educadores se pongan las pilas para, entre todos, empezar a ejercer esta responsabilidad.

No se trata de hacer una intervención sobre la población y cuartar su libertad sino crear un medio ambiente más saludable y personas responsables de su propio cuidado. Esto es lo que debemos conseguir entre todos: padres, familiares, personas, profesores… todos tienen responsabilidad que a veces pensamos ‘bueno pues al niño ya le enseñan en el colegio…' o al revés… ‘como el niño ya come bien en casa…' y al final, uno el otro, estamos en la situación en la que estamos.

Se ha llegado a escuchar que, desde que los centros comerciales abren los domingos, la gente se ha vuelto más pasiva en la actividad física y detiva ¿puede ser?

Aunque no hay que buscar culpables sí es verdad que es mucho más cómodo ponerse un chándal, coger unos carros enormes y pasear el centro comercial y comer comida rápida. Así no sólo no hacemos actividad física sino que además cargamos el carro con la mitad de cosas obesogénicas y, para colmo, nos hemos metido un par de platos llenos de salsa y grasa.

¿Podemos hablar de un perfil de persona obesa?

En esto momento el problema de la obesidad se centra más en un entorno no favorecido, familias humildes, inmigrantes… que suelen tener menos recursos económicos y menos necesidad respecto a la agen coral. Hoy en día es más barato comer mal que bien. Las personas con menos posibilidad de autocuidado o de reacción ante problemas de Salud tienen mayor riesgo de padecer obesidad. El tema, como hemos comentado desde el principio, es serio.

¿Qué se puede hacer desde los Medios de Comunicación y la Publicidad? ¿Culpables?

Prero hay que saber diferenciar entre lo que es publicidad de lo que es información. Yo creo que los medios llevan haciendo una labor estupenda desde los últos años y nosotros, que llevamos mucho tiempo en esta labor, jamás hemos tenido una respuesta educativa y un apoyo tan grande como ahora.

Otra cosa es que el dinero mueve la publicidad, pero para eso ya existe el código PAOS de regulación de publicidad para la población infantil. Ahí las empresas tienen que hacer un poco de autocrítica y procurar que los alentos sean más saludables y que el mensaje se acerque no sólo a la verdad, sino también a la Salud de los ciudadanos. Ver al cliente como a un ciudadano y nos sólo como a un cliente.

Todos tenemos que poner un poco más de nuestra parte y para los que tenemos un poco de responsabilidad institucional, los Medios de Comunicación son el eje transmisor para llegar a la población y trasmitir a todos los estamentos.

En este tema y otros temas. Os seguos necesitando…

NOTICIAS RELACIONADAS

Relacionados Posts

Premiados de la XX edición de 'Los mejores de PR'

Noticias recientes

Newsletter
Logo prnoticias

Suscríbete a nuestro newsletter!

Recibirás nuestro boletín de noticias y contenido exclusivo.