Aunque suene raro éste es el símil que han utilizado varias entidades que han observado de cerca a bebés con el propósito de saber cómo se comunican. Y es que la expresión de las emociones es un factor esencial en los preros meses de vida y así lo corroboran los expertos autores del estudio, que confirman que 'según se avanza en edad somos menos expresivos'.
Así lo confirma el 'I Estudio sobre Comunicación Gestual y Prosódica del Bebé' y así lo comentaron los catedráticos que han realizado dicho informe como Enrique García, Catedrático de Psicología Básica II de la UNED, Mariano Chóliz y Francisco Martínez, de las facultades de Psicología de Valencia y Murcia, Patricia Doliwa, Responsable de Marketing de Nuk y María Dolores Flores, del Ayuntamiento de Madrid.
Gracias a este estudio se han conseguido averiguar las claves para potenciar la felicidad de los bebés e incluso hacer que su estado de áno mejore. ‘Hemos hecho un Gran Hermano con los niños' comenta Enrique García, quién también aclara que ‘lo más difícil ha sido conseguir todos los permisos', tanto de padres como de estamentos que controlan todo este asunto.
Como nota curiosa cabe destacar que pese al consabido jaleo organizado la convocatoria de multitud de medios de comunicación y sus correspondientes equipos técnicos, los protagonistas de la noticia, es decir, los bebes que han participado en el estudio, ni se inmutaron ante la presencia de cámaras o flashes, cosa que no extraña ya que en este caso si que se puede afirmar con rotundidad que estos pequeños han nacido con una cámara que graba todos sus movientos desde el mismo día de su naciento. Posteriormente, como hemos apuntado, estos momentos filmados han dado lugar a una 'guía de la expresión del bebé'.
Enrique García además, dio unas pinceladas de lo que el lector puede encontrar en el estudio y en este sentido comentó que a medida que los propios bebés van evolucionando, éstos son menos expresivos y que a los tres meses se les puede distinguir distintas reacciones negativas como el enfado o la ira, mientras que, de forma positiva, sólo, la alegría.
Los bebés no hablan y muchas veces es difícil conseguir acercarnos a lo que sienten pero este nuevo manual supone, sin lugar a duda, un avance en la comunicación con los más pequeños de la casa. Un avance que tiene como objetivo prordial 'mejorar el comtamiento y la educación de los más jóvenes', como reconoce Enrique García.
