El caso es menearse. Debe ser el calor, pero en esta España nuestra, la desaceleración que no crisis se ve tapada los sonidos de una ciudad que se llena de fiesta y griterío. Ora los hombres que corren detrás de una pelota. Ora un Luis Aragonés, en tiempos criticado, y ahora ensalzado cual César haber llevado a la Selección a lo más alto. El abrazo de los Príncipes, la alegría de las gentes que con banderas de España inundan calles y fuentes y todo, bajo el techo de la crisis que no se nota. 14 millones de espectadores, ese dato dice todo. Atrás queda el manifiesto el español. El ESPAÑOL URGENTE, que necesitan nuestros chicos. Ese al que se suman literatos, políticos, periodistas, personas que entienden que es necesario que en España se domine el castellano. Tanto apuntar al niño a inglés, a francés que al final, tendrá que asistir a clases de español para españoles vascos, catalanes o gallegos… Si es que somos más papistas que el Papa, y lo que no pase aquí, ¿dónde puede suceder? En Arganda, ejemplo. O en la web, zapateronovayas.com aquello que el mister, el pueblo considera que todo lo que toca tiene gafe.
Dele usted pan y toros al pueblo y manténgalo callado… Seguos con la fórmula y sucede. La macro pantalla para el domingo, los cánticos que hoy se inauguran en el sur de Madrid y todos tan contentos. ‘Yo voy' ha sido la campaña que hemos escuchado y con la que nos han bombardeado para acallar a las fieras. Las que temen que esto vuele los aires pero mientras tanto, Bob Dylan nos dirá que ‘The tes they are a changing' (‘Los tiempos están cambiando'), Shakira moverá su cadera de un lado a otro de Arganda y entre sonidos, alcohol y fútbol a las masas se las calla en julio. Luego viene el mes de agosto y en vez de ‘YO VOY', se escuchará ‘YO ME VOY' que aunque sea un momentito tengo que ponerme morena. Ayer escuché en la televisión una frase que me da asco escribir, ‘Tengo el culo que me huele a playa'…. Yo no lo capto, pero debe ser que estoy ‘Out' del lenguaje popular de estas gentes españolas que aunque no coman se van 30 a un apartamento en Torrevieja para que las vecinas no digan que no veranean.
Y entre tanto, el pueblo se callará con los calores un mes más y entre el YO VOY, YO ME VOY, y el popular dicho ‘YO ME VENGO'… nos da para música, para playa y para trabajar algo a la vuelta, pero luego Dios dirá. Así que venga a vernos y que alguien me explique en dónde está la crisis si tengo para ir al concierto de Juanes, para viajar a Viena a gritarle a Iker, el chaval de Móstoles, y para volver a pasármelo en grande con el resultado del domingo en la plaza con la macropantalla que ponga el ayuntamiento de turno, que aunque difícil, todo puede suceder haya o no crisis. Para eso sí hay dinero. Luego para calmar los ános tenemos el FICEB, el salón no en Madrid. Para tener subidones y bajones con los calores. Sexo y rock n roll, y todo en la ciudad de Alberto. Y es que aquí como decía sabía, ‘Pongamos que hablo de Madrid', aquí cabemos todos. Y así nos va.
Y mientras tanto, la presidenta de la Comunidad, ahorra de las arcas de los contribuyentes y une consejerías, quita y pone peones y remodela todo después del congreso mariano. Digo mariano que fue exclusivamente de él y para él, eso es una manera de vivir la España actual. Los marianistas, los albertistas, y los esperancistas…. Estos últos, nunca pierden la Esperanza. Como el resto de los españoles que suspiran que el país se paralice el domingo y ya no te cuento si ganan.
Los acordes de YO VOY se apagarán con el alirón, y todos tan felices, que para eso estamos en verano y si hay para vivir, lo demás, que lo arregle Teresa, la de los palabros de la RAE, o José Luis, que es el de los marrones de Jesmar…
Yo no voy también existe. Conozco personas que no calman sus ansias con el fútbol y no están en los macroconciertos, sean en Arganda o en el Madison Square Garden. A lo mejor vienen de cantar la camisa negra de Juanes y ya no pueden más.
Quizás, para nosotros, ‘la respuesta esté en el viento', y la aceleración, no sabemos dónde. Eso sí, suben los billetes de autobús en agosto, aquello que como no se nota con los calores, cuando usted regrese, se encontrará la desaceleración en el bolsillo, y ese, ya no pesará, precisamente. Y que vivan las VISAS, la oro, la de plata o la que usted quiera.
Feliz finde, como dicen los progres…
ANA DE LUIS, DIRECTORA '¿QUÉ DICEN?'










