QUITO (09/07/08) Cerca de 200 empresas se encuentran bajo el punto de mira del Gobierno ecuatoriano, concretamente las pertenecientes al Grupo Isaías. De hecho, hay dos canales de televisión en abierto (TC Televisión y Gamavisión), dos canales de cable (CN3 y CN7) y una emisora, las cuales han sido incautadas el Gobierno de Rafael Correa. Ya lo anunciábamos ayer, TC Televisión temía un embargo de sus bienes parte de la AGD. De hecho, agentes policiales del gobierno han bloqueado la entrada a ambos canales. Es tal la situación que hasta el mismo ministro de Economía ha ditido ante su desacuerdo.
‘Yo nací aquí… y me quedo aquí…que todos somos TC Televisión'. Este es el lema que nos encontramos en la página oficial de la cadena ante su bloqueo. Y es que el motivo no es otro que el juicio pendiente contra los hermanos William y Roberto Isaías, una supuesta malversación de dinero del Estado entregado a Filanbanco, banco del que eran propietarios. De hecho, la familia de los Isaías son dueños de ambas cadenas.
La noticia ha acaparado buena parte de los medios internacionales. Y es que el hecho, aunque diferentes motivos, recuerda al caso de Radio Caracas Televisión, que tuvo que salir del aire ante la finalización de su concesión para emitir en abierto en Venezuela. Sin embargo, este hecho es diferente. Y es que dichos canales están siendo investigados pertenecer a la familia Isaías y la malversación de dinero del Estado.
Ante todo, la presencia de los policías y la intervención ha creado un estado de alerta en Ecuador. Y es que hace sólo unas horas tanto el presidente Rafael Correa como el gobernador de Guayas, Leonardo Vicuña, aseguraban que se trataba de un sple ‘rumor' y que no se incautaría ningún canal de televisión. Un hecho que parece no estar cumpliéndose.
Las formas no están gustando y este es el motivo el cual ha ditido el ministro de Economía, Fausto Ortiz, quien se ha negado a firmar la orden la que el Gobierno incauta el grupo empresarial Isaías, que es propietario de estos cuatro canales de televisión y casi 200 empresas.
Y es que el Gobierno reclama a los hermanos prófugos en Miami nada menos que 660 millones de dólares, unos 420 millones de euros, el agujero patronial de Filanbanco, que fue intervenido en 1998 durante la crisis que vivió el país.
Los rumores y sospechas parte de los empleados de los canales de televisión comenzaron con el nombramiento de José Toledo, un periodista y ex funcionario público cercano a Correa, en el cargo de vicepresidente de noticias y al gerente de ambas televisoras.
Igualmente hay que destacar el caso de Radio Sucre, que ha sido cerrada y sellada representantes del Consejo Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) y agentes policiales. Igualmente se ha confiscado el equipo de transmisión de la torre. El argumento utilizado es que estaban utilizando una frecuencia que no había sigo asignada, señala el CPJ. Por su parte, la emisora ha enviado a Conatel documentos que demuestran que Radio Sucre sí tenía asignada esa frecuencia.
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