Las Islas Baleares han hecho su agosto y han dado el campanazo proclamándose como la prera comunidad autónoma que al terminar el año tendrá totalmente plantada la receta electrónica. Con esta tarjeta, el farmacéutico podrá leer la historia del Paciente, el tratamiento y la duración del mismo.
'Comodidad, seguridad y rapidez', esto es lo que otorgará la receta electrónica a quienes utilicen el servicio. Así lo ha descrito Francesc Antich, presidente del Govern de las Islas Baleares, la única comunidad autónoma que podrán ‘fanfarronear' de ser la prera en plantar la receta electrónica en 2008. Ya se ha puesto en marcha en Ibiza y casi en toda Mallorca, y en el últo trestre de 2008 quedará plantada en Menorca. A día de hoy, en Formentera, más de la mitad de las recetas ya lo son.
La progresiva instauración de la receta electrónica comenzó en septiembre de 2006 y en poco más de dos años gozarán de ella 52 centros de Salud, siete hospitales públicos y 407 oficinas de farmacia. El proyecto ha costado unos cinco millones de euros y los más beneficiados serán los enfermos crónicos que no tendrán que ir a los ambulatorios cada poco tiempo, sino que podrán dirigirse directamente a la oficina de farmacia.
En las Islas están que no se lo creen y una vez su protagonismo irá más allá de las paradisíacas playas (que no es poco), su cla veraniego y las vacaciones de la Familia Real. Todos los digitales destacan pasado el ecuador del año que serán ellas, las Baleares, quiénes den una lección de recetas, siglo XXI y tecnología al resto.