Es difícil precisar cuantos de los 70 millones de blogs a los que se puede acceder en Intet tienen como base contenidos sanitarios pero lo que sí es cierto es que los profesionales sanitarios no son ajenos a esta tendencia y, eso, muchos de ellos comparten sus experiencias profesionales con el resto de la comunidad virtual. Pero, ¿se respeta en todos estos casos la confidencialidad de los pacientes, protagonistas involuntarios de estas bitácoras? El diario El Mundo recoge esta información.
Un equipo de la Universidad de Pensilvania ha analizado 271 blogs médicos para comprobar si violan algunos principios éticos de la Medicina y los preros resultados que arroja el estudio son elocuentes ya que parecen confirmar que algunos profesionales sanitarios tales como médicos o enfermeros ponen en peligro la confidencialidad de los datos de algunos de sus pacientes al narrar sus vivencias en los famosos blogs. En concreto, el informe señala que, con demasiada frecuencia, ‘los galenos revelan suficiente información de sus pacientes como para que estos sean reconocibles'. Al menos así lo indica María Valerio, que se hace eco de esta noticia en el diario El Mundo.
Y es que, según el estudio, en el 42% de los blogs revisados se describían casos particulares de pacientes concretos, en tres de los casos se publicaron fotos de los pacientes mencionados y en otros ocho casos los facultativos complementaban la información con alguna radiografía, eso sí, sin ningún dato personal que permitiese la identificación del paciente.
Además, el 56,8% de los blogs examinados contenía información suficiente para reconocer a su autor, y también era fácil acertar su especialidad y la identidad de algunos colegas citados. Por otro lado, en el 17,7% de los casos se hablaba de los pacientes en un tono negativo.
Otro aspecto negativo que cabría destacar, tal y como reza el informe que ha sido publicado en la revista ‘Journal of General Internal Medicine', es el asunto referente a la declaración de conflictos de intereses. Es decir, ‘a diferencia de los artículos que publican en revistas médicas, en los que los profesionales sanitarios están obligados a declarar si reciben dinero de alguna compañía, algunos de estos blogueros (un 11%, concretamente) incluyen publicidad de productos y fármacos, o incluso los mencionan en sus textos, sin aclarar si reciben algún tipo de compensación económica esta especie de promoción', narra Valerio en su noticia.
Pero pese a todo lo anterior, los autores del estudio reconocen que los blogs tienen también su vertiente positiva ya que ‘constituyen una buena manera de acercar la medicina al público general'.
Sea como sea, lo que no hay que olvidar es que ‘los profesionales médicos deben asumir sus responsabilidades', citan los autores del estudio. Por eso, ‘se hace necesario que las organizaciones médicas se pliquen para guiar en la buena práctica de los profesionales sanitarios'. Este es el deseo de quienes han elaborado el informe, anhelo también que debe ser compartido todos los agentes plicados.