SANTO DOMINGO (28/08/08) Una de las situaciones más difíciles a las que debe hacer frente un periodista se encuentra a la hora de elegir si publicar o difundir una información. En el momento en que una empresa ve dañada su agen pública se suceden las denuncias y los juicios contra el comunicador del mensaje. En este momento, la libertad del periodista se ve coartada. En este caso se encuentran Nuria Piera, Huchi Lora o Alicia Ortega. Unos casos que han sido seguidos la prensa dominicana.
Las periodistas Nuria Piera y Huchi Lora se encuentran actualmente sumergidas en un proceso judicial. Todo ha comenzado con una información hecha pública amabas comunicadoras. Según relataban, la empresa Lácteos Dominicanos (LADOM) servía leche en el desayuno escolar que contiene suero desproteinizado, el cual es un desecho sólo de la industria láctea que es destinado a los anales. Rápidamente, la empresa las ha demandado y ha solicitado la rectificación parte de las periodistas. A pesar de todo, ninguna de ellas se ha mostrado dispuesta a cumplir con la solicitud de la empresa hasta que se demuestre que la información es falsa.
Esta demanda podría haber influido en la decisión de Nuria Piera de abandonar el programa CDN Radio, el cual compartía con Huchi Lora. Por otro lado, hay que destacar el caso de Alicia Ortega, quien ha sido demanda la empresa WM Comercializadora Interamericana ‘difamación e injuria'.
En este caso, la periodista anunciaba en su programa El Informe que la empresa ‘estafaba a varias personas' al ofertarles trabajo bajo la condición de que comprasen sus productos. Actualmente, WM Comercializadora Interamericana pide una indemnización de 300 millones de pesos daños de agen. Los abogados de la empresa señalan que en este programa se reproducen ‘informaciones mentirosas y dañinas'.
Ambas denuncias se encuentran protegidas la ley. Sin embargo, diversos sectores de la prensa dominicana apuntan a que casos como estos son los que coartan la libertad de los periodistas, que ven su trabajo informativo litado. La principal consecuencia de estos actos deriva en la autocensura informativa. El temor a enfrentarse a una empresa a pesar de tener una información de interés público se convierte en un signo de que no hay libertad de expresión. Un hecho que se da con demasiada frecuencia en el periodismo actual.
Estos son algunos casos que podemos apreciar en el periodismo de América Latina y más concretamente en República Dominicana.
En casos extremos se llega a las amenazas e intidaciones, no ya sólo de empresas. Hay que destacar el caso del cámara de Teleunión Normando García, que ha sido asesinado a preros de agosto de este año. Normando varios años trabajando en el programa ‘Detrás de las Noticias', producido el canal Teleunión de Santiago. También era coproductor del espacio ‘Pachanguíando'.
El camarógrafo llevaba varias semanas recibiendo amenazas de muerte, procedentes de desconocidos descontentos con las informaciones reveladas el periodista, en sus programas, relataba Reteros sin Fronteras. De hecho, antes de su asesinato, desconocidos incendiaron su coche. Hasta el momento, no se ha encontrado al culpable.
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