El tétanos neonatal provoca la muerte de 180.000 niños en el mundo cada año, lo que significa que cada tres minutos fallece un niño, principalmente en los países en vías de desarrollo, esta causa totalmente evitable. UNICEF, en su continua lucha la defensa de los más pequeños, lanza, con la colaboración de Dodot y segundo año consecutivo, la campaña ‘Un envase = una vacuna'.
El modo de colaborar con esta iniciativa, enmarcada bajo el lema ‘Juntos podemos acabar con el tétanos neonatal', es mediante la compra de pañales o toallitas de la marca DODOT. De este modo, cada envase que se adquiera, la ONG enviará una vacuna para proteger tanto a madres como a niños de esta enfermedad ya erradicada en los países desarrollados.
Una ve que finalice la recaudación de las vacunas, miembros de UNICEF y Dodot, acompañados la madrina de la campaña, la modelo y madre Estefanía Luyk, se trasladarán a la República Centroafricana para conocer su situación y observar las campañas de vacunación que se realizan. Este país, que tiene cerca de cuatro millones y medio de habitantes, cuenta con un índice de mortalidad infantil en menores de cinco años que alcanza el 176 cada mil.
En los mismos envases se explica la mecánica del programa, así como información sobre el tétanos neonatal, que también aparece en la web de Dodot. En cuanto a la información dirigida a los medios, la marca de productos para higiene del bebé ha presentado la campaña y tras el viaje ofrecerán material gráfico y entrevistas para conocer más a fondo la realidad del país.
En este sentido, la directora de comunicación de Dodot, Gloria Codinas, ha señalado a prsalud que acudir al lugar donde se distribuyen las vacunas permite ‘ser consciente de lo tante que es para estas personas que no tienen acceso a las vacunas que se convoque esta campaña'.
Asismo, señaló que en la pasada edición se consiguieron ocho millones de vacunas, lo que esperan que en esta campaña se consiga, ‘como míno', igualar la recaudación. Codinas explicó también que, aunque la campaña no se incrementa la venta de estos productos, las madres ven este proyecto como ‘una otunidad para colaborar y una alianza común la infancia'.
Esta patología aparece cuando las bacterias del tétanos entran en contacto con una herida abierta. Así, la mayoría de los contagios se producen cuando se corta el cordón umbilical con un instrumento sucio, que transmite las esas. Si no hay un tratamiento, los bebes infectados no suelen cumplir las cuatro semanas de vida.
Una vez contraída, la enfermedad se caracteriza la rigidez de los músculos faciales que piden la succión de los bebes y lo tanto la alentación, creando además problemas para llorar. La dificultad de movientos se expande después a todo el cuerpo y se producen espamos.
La única manera de prevenir el tétanos es vacunar a las madres y mejorar las prácticas del parto. Así, las mujeres necesitan cinco dosis de vacunas como parte de cu cuidado neonatal. De esta manera, se protegen para siempre al tiempo que producen anticuerpos que también protegerán al bebé durante los preros meses de vida, el momento más peligroso. Posteriormente, los pequeños tendrán que recibir nuevas dosis a los cuatro, seis y diez meses.
Sin embargo, las cifras también atan datos esperanzadores, ya que, desde 1991, un total de 11 países han conseguido elinar la enfermedad y más de 80 millones de mujeres han sido vacunadas, lo que demuestra que acciones como las de estas dos entidades tienen sus frutos.
Gloria Codinas, directora de comunicación de Dodot |