Volviendo al Seminario Falsificación de Medicamentos: un negocio de riesgo, otro de los objetivos de éste era debatir la necesidad de reforzar legalmente la lucha contra este delito. Dicho el Magistrado de la Sala Penal de la Audiencia Nacional estas leyes son flojas y no se equiparan a las de drogas duras, que también entran en los delitos contra la Salud Pública. ¡Hay que revisar el artículo 362 del código penal!
Empezaba Ricardo Rodríguez, Magistrado de la Sala Penal de la Audiencia Nacional, apuntando datos que dejaban a los periodistas asistentes al seminario con los pelos de punta: 'alrededor del 10% de los medicamentos que circulan el mundo son falsos', un centaje alto pero que puede empeorar en los próxos años si no se pone freno a Intet. 'En los países subdesarrollados el 25% son falsos y en África este centaje se duplica'. De momento son los países desarrollados quiénes bajan esta cifra, pero esto parece que no será así con el tiempo… Este mercado, 'amplio y lucrativo', es un 'negocio que apenas genera gastos y que todos son beneficios' y, para colmo, las penas no se equiparan a las de las drogas duras, a pesar de ser un delito tipificado en el Código Penal, dentro de los delitos contra la Salud pública… ¿o quizá sea este el problema?
'En el artículo 362 se recoge la alteración o sulación de medicamentos, que es considerado como grave, y lo tanto conlleva pena de cárcel de hasta tres años y en circunstancias extraordinarias hasta cuatro años y medio de prisión y una multa que puede llegar hasta los 220.000 euros' ¿Suficiente? Continúa el Magistrado que ‘esta pena no tiene sentido cuando la vía Administrativa está penado con una multa que va desde los 600.000 euros al millón de euros o un quíntuplo del valor de los medicamentos falsificados'.
A juicio del Magistrado, 'sería conveniente que la pena se equiparase a los delitos contra la Salud Pública para el caso de las drogas duras, estableciendo agravantes que pliquen una pena mayor cuestiones como que los destinatarios fueran menores, que fuera realizado una organización crinal o en casos de notoria tancia'. Esto permitiría a los jueces de instrucción poder 'acordar la prisión provisional y evitar situaciones como las que se han vivido recientemente, en el que este tipo de delincuentes han vuelto a reincidir en el delito en muy breve plazo'.
Y es que esto no es broma. Nerea Rodríguez, coordinadora de Área de la Subdirección General de Gestión Aduanera, explicó que, según datos de las autoridades aduaneras europeas 'durante 2007 se incautaron de 4.081.000 envases de medicamentos en las fronteras', hecho y momento que aprovechó Nerea Rodríguez para pedir ‘la colaboración' de todos los actores del sistema sanitario así como del poder judicial.
Dentro de las propuestas para luchar contra la Falsificación de Medicamentos, Francisco Toquero, vicepresidente de la Organización Médica Colegial, se puso del lado del Magistrado y abogó 'actualizar la legislación adecuando las penas al delito así como dotar a la Agencia Española del Medicamento de los recursos necesarios para que puedan asegurar que las medicinas en comercialización son seguras y eficaces'. Además apostó 'mejorar los sistemas de control de los canales de distribución, aplicar las nuevas tecnologías para identificar las falsificaciones y aumentar la colaboración de la sociedad y las autoridades'.
Un aspecto este en el que coincidió José Antonio Herrada, presidente de la Coalición de Ciudadanos con Enfermedades Crónicas, para quien es necesario 'hacer un llamamiento a todas las partes plicadas sobre la tancia de conseguir que el derecho a la Salud prevalezca enca de otros aún en tiempos de crisis'.
NOTICIAS RELACIONADAS
Falsificados más de cuatro millones de medicamentos en 2007
¿Cómo operan los equipos especiales?
Por últo, David Shore, associate director of Global Security, Pfizer Internacional, explicó que una de las verdaderas razones las que se está incrementando la falsificación de medicamentos es que se trata de un mercado que mueve, al menos '75.000 millones de dólares, muy enca de otros mercados ilegales como puede ser el tráfico de tabaco o el de estupefacientes, con la diferencia de que para quien realiza estos delitos es mucho menor'. Además este mercado crece a un ritmo acelerado, 'un 30% al año'. Para David Shore, ‘éste es un problema real que necesita que se tomen las medidas necesarias para aumentar los controles'.