Este últo año sin duda se ha deteriorado la relación de los medios de Comunicación con la Casa Real. El Caso Marichalar se suma a una larga lista de desencuentros en los últos meses, en los que se ha informado de ciertos temas que han causado desagrado en el entorno del Rey y de la Familia Real. Es esto que ha causado gran revuelo la decisión de Zarzuela de no permitir este año la entrada de periodistas para cubrir informativamente la recepción ofrecida tradicionalmente en el Palacio Real con motivo del día de la Fiesta Nacional, el próxo 12 de octubre.
a Casa Real alega ‘falta de espacio ante el incremento en el número de invitados' más de un millar para justificar la medida pero, en cualquier caso, aseguran que ‘todos los medios de comunicación tendrán un representante en la recepción'. Según la agenda oficial remitida el vies la Casa del Rey, la cobertura informativa del acto será ‘exclusivamente gráfica y litada a la línea de saludos' y será ofrecida en régen de 'pool' medios públicos.
En concreto, esto significa que los medios no pueden enviar a los periodistas que elijan para cubrir la recepción y que la entrada de los informadores dependerá de las invitaciones que decida cursar la Casa Real, que será la que seleccione a los profesionales con la entrada autorizada, presumiblemente periodistas acreditados la Casa Real. Desde diferentes asociaciones de periodistas como la FAPE quitan hierro al asunto, señalando precisamente que todos los periodistas que habitualmente cubren Zarzuela estarán acreditados en la gala, lo que no supone ningún problema.
Otros profesionales niegan relacionar cualquier restricción al trabajo periodístico con la famosa tada de Jae de Marichalar en la revista Época y con cualquier desencuentro de la Familia Real con la prensa. De esta manera se hace la diferencia entre los profesionales que habitualmente siguen a la Casa Real y otros que más bien responden a programas de entreteniento o de cotilleo, esos que han estado en el punto de mira de las diferentes asociaciones de periodistas.
En la recepción del próxo domingo están invitados el Gobierno en pleno, las altas instituciones del Estado y la cúpula militar, el cuerpo diplomático y personalidades del mundo de la economía, la cultura y los medios de comunicación. El acto tendrá lugar en el Palacio Real después de la Parada Militar y estarán presentes tanto los Reyes como los Príncipes de Asturias, las infantas Elena y Cristina y el esposo de ésta, Iñaki Urdangarín.
Seguiremos Informando…
