Carlos Sl negocia la compra de un 33% de Prisa'. Éste es el pactante titular que nos entrega la edición de esta mañana de Hispanidad.com. El diario de Eulogio López analiza en el artículo los caminos que se abren en Prisa después del anuncio de un plan de refinanciación que podría incluir una ampliación de capital. Con ello, Tón (sociedad de los Polanco que controla Prisa), podría reducir su participación desde el 74% actual hasta un 58% para dar entrada a un socio de referencia. ¿Quién? Según Hispanidad, Carlos Sl, que además no se conformaría con un centaje minoritario.
POR SU INTERÉS REPRODUCIMOS EL ARTÍCULO DE HISPANIDAD:
De llevarse a cabo, sería el golpe de Estado de Juan Luis Cebrián, que se quedaría como mandamás, que la exigencia del mexicano es clara: la participación de Tón debe ser igual a la suya (del 52 al 33%). Agobiados la deuda, tanto Ignacio Polanco como Francisco Pérez podrían ceder.
La asonada de Cebrián se ha disfrazado de financiación adicional 2.000 millones de euros. Si no sale, se retomará la venta de activos, sobre todo de Digital+. Si sale, será el fin del clan Polanco y la entronización de Cebrián hasta que Sl se haga con la mayoría (el paso siguiente). Otro problema: ZP cada vez se fía menos de Cebrián.
El plan, urdido Cebrián y Felipe González, supone la traición definitiva del consejero delegado a la memoria de Jesús Polanco, que siempre consideró PRISA un negocio familiar. De dos familias, las que copan el grupo Tón: los Polanco y los Pérez González. Ambos poseen el 52% de la compañía.
En definitiva, los hechos son éstos: PRISA se encuentra con una deuda que ronda los 6.000 millones de euros y con El País en caída libre de ventas (ventas reales) y la SER en caída libre de publicidad. Su situación contable es de quiebra técnica. Y en esas surge el mago Juan Luis Cebrián y habla de la entrada de socios financieros que atarían unos 2.000 millones de euros. ¿Socios financieros para un Grupo con capacidad de generación de recursos pero agobiados la deuda financiera?
Lo cierto es que la carta de Cebrián y de su aliado, Felipe González, es muy otra: es el mexicano Carlos Sl, enemigo jurado de Telefónica y ahora socio de La Caixa. Entiéndase, no es la prera vez que el dúo CebriánGonzález acuden a Sl, pero entonces se trataba de que compraran Digital+, y la respuesta de Telmex fue durísa: Sl no quería la plataforma, quería PRISA entera y no estaba dispuesto a pagar ni 1.000 millones de euros todo el grupo.
Ahora el planteamiento ha sido distinto: Cebrián sabe que Sl nunca acepta ser socio minoritario: quiere mandar. Las familias Polanco y Pérez, que controlan a través de Tón un 52% de PRISA, quieren seguir el mandato de su padre y amigo: mantener el control. Pero la deuda ahoga, y Cebrián no es tonto: el pato sería que Sl comprara el 33% de PRISA y que Tón redujera su participación hasta ese mismo centaje: el 33%.
A partir de ahí, naturalmente, sería Cebrián quien mandaría en PRISA. Con Felipe González la Internacional Socialista detrás. Eso sí, Sl no permitiría tal cosa sino como solución transitoria: En otras palabras, que el mexicano acabaría hacerse con la mayoría de PRISA.
Al parecer, era a esto a lo que se refería Juan Luis Cebrián en su artículo póstumo sobre Jesús Polanco, cuando narraba una conversación con el actual presidente de PRISA, Ignacio Polanco, en la que hablaba de que el secreto para la duradera relación del fallecido Polanco y el periodista era "lealtad mutua".
En la mañana del lunes Cebrián ofrecía una rueda de prensa en la que se refería a la venta de Digital+, cifrada en 2.000 millones de euros las nuevas entradas de capital, todo ello para despistar, pero sin dejar de apuntar la coartada: "La posible entrada de nuevos socios". El nuevo socio deseado es Sl.
Y ojo, que Rodríguez Zapatero no se fía nada, lo que se dice nada, de Felipe González y Cebrián. Por eso, el semanario El Siglo aseguraba en su últo número que ZP había solicitado a Telefónica que apoye a Mediapro en contra de PRISA, que ese es el multedia verdaderamente progubernamental (además de RTVE, Tele 5, etc.) y/o PRISA. Y si la opción de Sl no sale: pues Cebrián seguirá trabajando para los Polanco y habrá que vender todo a toda prisa para pagar deuda.