Pedro Alonso, codirector del Centro de Investigación en Salud de Manhiça (Mozambique) y recién galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional, tiene otro galardón en su vitrina. Esta vez han sido los periodistas, la ANIS en su nombre, quiénes han reconocido la labor del investigador en su lucha contra la Malaria y en la difusión de los avances científicos a través de los medios de Comunicación.
En la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid, en la casa de los periodistas, la Asociación Nacional de Informadores de la Salud ha galardonado al doctor Pedro Alonso con la I edición del premio ANIS en reconociento ‘a su trabajo en torno a la salud pública desde el marco de la cooperación internacional y, asismo, su contribución a la difusión de los avances científicos conseguidos a la sociedad en general a través de los medios de comunicación', afirma el presidente de la Asociación, José Manuel González Huesa.
'Sin duda', añade el presidente de ANIS, 'el trabajo de Pedro Alonso contribuye, no sólo a la mejora de la salud en los países en desarrollo y, con ello, a la salud mundial, sino que, además, gracias a su labor como gran comunicador, ayuda en gran medida a que las buenas noticias sobre la medicina y la salud sean también noticia en los grandes medios de comunicación'. Asismo destaca la calidad de las informaciones que provienen del médico e investigador Pedro Alonso para los informadores de la salud: ‘Junto a su colaboración con el objetivo informativo de que los avances científicos puedan llegar a la sociedad en un lenguaje comprensible para la población general, es de destacar la gran rigurosidad científica de los mensajes que transmite'.
Y es que este investigador español de justificado prestigio internacional es uno de los científicos más relevantes en los últos años debido a su lucha contra la malaria desde el Centro que codirige en Mozambique. No en vano, gracias a su labor y a la de su equipo, ‘el mundo podría contar en el año 2011 con la vacuna contra la malaria', según el propio investigador. 'En la actualidad, nos encontramos a las puertas de un ensayo clínico en fase III en el que han participado unos 16.000 niños. Se trata de un trabajo que reproducirá lo que ya hemos hecho previamente en otros ensayos, pero que debido a su magnitud nos ayudará a ser más precisos y fiables en cuanto a la seguridad y la eficacia de este candidato a vacuna', explica el investigador.