El judío Madoff ha estafado a sus millonarios amigos y a su comunidad. Es grave pero no es lo peor, su gente respira la herida, y entre judíos eso tiene un significado, ira bíblica que no tiene perdón. El boletín electrónico judío ITÓN GADOL asegura que 'instituciones y personajes judíos destacados de la diása están afectados la millonaria estafa'. El pacto en el mundo filantrópico judío es calificado de 'muy grave'. La Wunderkinder Foundation, organización benéfica de Spielberg, habría invertido una parte tante de sus activos en la estafa Madoff. También está afectada la Fundación Elie Wiesel para la Humanidad, benéfica y educativa, fundada el escritor y superviviente del Holocausto. La Fundación de la Familia Chais, que durante años donó casi 12,5 millones de dólares anuales a causas judías en Israel y Europa oriental, acaba de cerrar sus puertas haber invertido todo su patronio en Madoff.
El estropicio ha llegado a Israel, arrastrando a Technion, el Instituto de Tecnología del país. Ha perdido unos 25 millones de dólares invertir los fondos recaudados mediante donaciones en Madoff. La lista sigue, salpicando a apellidos judíos de renombre de varios países. El magnate inmobiliario y periodístico Morter Zuckerman están entre los principales afectados y Alicia Koplowitz, la millonaria española de origen judío, también estaría afectada.
La filosofía de Madoff era sple: estafar a los millonarios de su entorno de confianza, con el pensamiento de que tan acaudalados clientes jamás necesitarían el dinero. No contaba con la monumental crisis que se ha desatado. El castigo a una estafa tan brutal, es de risa: libertad bajo fianza de diez millones de dólares y prohibición de salir del Estado de Nueva York.
PD. La bolsa española ha tenido en 2008 el peor año desde el siglo XVIII, lo dice el Servicio de Estudios de la Bolsa de Madrid. Ha perdido el equivalente al 32% del PIB de España, o sea la tontería de 338.000 millones de euros. ¡Enhorabuena a los que no tienen un duro en bolsa¡.
Y estrambote. Ayer el presidente de la Bolsa de Madrid, Antonio Zoido, dió una lección de austeridad. Tras la tradicional comida anual con la Prensa Económica no regaló ni la habitual agenda. Todo un símbolo de los tiempos, y lección para mangantes políticos, que tiran con pólvora del Rey.
MIGUEL CIFUENTES
PERIODISTA