¿Cómo captar la atención de un niño con Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad? ¿Es positivo el castigo? Un 5% de los niños españoles padecen esta patología que padres y colegio no saben cómo afrontar. Los profesores están dispuestos a ayudarlos pero carecen de formación e información. ANSHDA, consciente del problema, ha editado un manual con la ayuda de Medidaluna.
‘Hiperactivos. Estrategias y técnicas para ayudarlos en casa y en la escuela' es el prer libro dirigido tanto a padres como profesores y profesionales de la sanidad que no es una obra de autor sino que recoge el conociento de los expertos más prestigiosos del mundo en materia de hiperactividad expuesto durante la celebración del II Congreso Nacional sobre TDAH en enero de este año.
Además incluye los testonios personales de un joven afectado y de una madre que relata su experiencia con un hijo hiperactivo. Estos testonios, junto con del catedrático de Psiquiatría y miembro de la Academia de Medicina de Nueva York y paciente con TDAH, Luis Rojas Marcos, encuadran la prera parte de la obra.
La segunda parte, titulada ‘Las intervenciones científicas', recopila las técnicas y recomendaciones de los expertos en esta patología, como son el profesor de Investigación del departamento de Psiquiatría de la Universidad Médica The Suny Upstate en Siracusa, Nueva York, Rusell A.Barkley y el psicólogo de la Fiscalía de Menores de la Comunidad de Madrid, Javier Urra.
Junto a ellos también atan su conociento la psicóloga costarricense Marina Peña; el neuropediatra del Hospital La Zarzuela de Madrid, Alberto Fernández Jaén; el director de Programas de Formación en Terapia Familiar del centro Antheo de Valladolid, Jesús Bernal Hernández; el presidente de la Fundación de Neuropsicología Clínica de Buenos Aires, Rubén O. Scandar y la doctora en Pedagogía y profesora del Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación de la Facultad de Psicología de Educación a Distancia (UNED), Isabel Orjales.
El neurólogo infantil, el doctor Fernández Jaén, señala que lo más tante es detectar los síntomas que pueden indicar esta patología en el menor. El doctor apunta que los principales factores que alertan de la presencia de este síndrome son la presencia de problemas sociales, de autocontrol de aprendizaje o cambios bruscos en el estado de áno. Una vez que se han detectado estas anomalías, el diagnóstico debe ser, según Jaén, ‘multodal', de tal forma que tanto la familia, como el colegio y los padres se hayan dado cuenta del problema.
Una vez diagnosticado, los tres factores para superar esta enfermedad con ‘éxito' son ‘una familia preocupada, que el niño tenga unas capacidades que compensen las dificultades' provocadas la patología y que ‘responda satisfactoriamente al tratamiento'.
En este sentido, afirma que el tratamiento médico deberá desarrollarse ‘cuando se precise' y que todos los agentes plicados en la formación del niño deben colaborar para conseguir que ‘sea feliz'.
Asismo, destaca que la diferencia en el número de afectados entre las diferentes Comunidades Autónomas se debe a un ‘mal diagnóstico', sobre todo si se refiere a cifras muy altas, enca del 5 ciento. Cerca de este centaje se encuentran Murcia, Canarias o Baleares, donde hay un 4,79; 4,72; y 4,62 ciento respectivamente. En el extremo opuesto se encuentran País Vasco, Navarra y Madrid con un 3,37; 3,67 y 3,97 ciento respectivamente.
Una persona que conoce muy bien esta patología, sus consecuencias y cómo superarla es Mario Lázaro, un joven de 18 años paciente de TDAH. ‘Quien no ha padecido esta enfermedad no sabe lo que es', afirma este estudiante de ingeniería que recuerda su infancia como una ‘época de inseguridad' ante sí mismo y en la que el colegio le provocaba ‘estrés' ‘no poder llegar a alcanzar las metas como los otros niños de clase'. Desilusiones que se tradujeron en ‘apatía' y ‘agresividad'. Sin embargo, todo cambió cuando le diagnosticaron este síndrome y comenzó su tratamiento.
Desde un presente esperanzador Mario mira un pasado en el que llegó a asumir que debía estar permanentemente castigado su conducta, y afirma que tanto los padres como los profesores ‘deberían tener una mayor documentación' para tratar a estos niños. Por este motivo señala el libro como ‘una gran ayuda'.
Otra de las personas que conoce muy de cerca este problema es la presidenta de La Asociación de Niños con Síndrome de Hiperactividad y Déficit de Atención (ANSHDA) y madre de un hijo con hiperactividad, Teresa Moras. Ella, que ha tenido que educar a su hijo, señala que el aspecto de la enseñanza es el que genera más preguntas. En este sentido, apunta que ‘se ha conseguido que se conozca el trastorno pero no se ha solucionado la cuestión educativa' ya que los informes escolares de estos niños se siguen refiriendo a los síntomas de este trastorno como la falta de atención para calificar negativamente la conducta del alumno.
Así, aboga no reducir las exigencias, sino ofrecerle más tiempo para terminar sus exámenes o entregarle las preguntas separado. Soluciones sencillas al alcance de todos los docentes que pueden permitir mejorar la calidad de vida y el desarrollo tanto profesional como personal de estos niños.










