Cerca del 80% de los internautas españoles han comenzado a sustituir a su médico un buscador de Intet, según han rebelado recientes estudios, pero no todas las web sobre salud son fiables. Ante este nuevo comtamiento, expertos y redes sociales se encargan de ofrecer claves a los usuarios para que reconozcan los sitios adecuados.
Un ejemplo de esto es el blog ‘Consumo Sanitario' de María Rodríguez, que aborda este problema e incluye algunos consejos para encontrar las páginas más fiables. Así recomienda, en prer lugar, fijarse en las fuentes, comprobando que estén identificadas y que las opiniones, estudios o consejos que se formulen lleven la garantía de un profesional con nombres y apellidos.
Asismo señala la tancia de conocer la página web, observando cómo se financia, quién es el dueño y el rigor de las opiniones, así como si sus contenidos se actualizan periódicamente y se puede fiarse de su precisión y sistemática.
Junto a esto Rodríguez recomienda ser ‘extremadamente cauteloso' con los sitios que emiten publicidad de una determinada marca o producto o de aquellos otros que se resisten a facilitar datos de las fuentes de información más tante. Además apunta la necesidad de contrastar la opinión que facilita la red acudiendo a revistas especializadas, recabando información oficial o pidiendo opinión a un médico.
Por últo, frente a los espacios dudosos, recomienda algunas web como las de la Organización Mundial de la Salud (OMS); la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, del Ministerio de Sanidad y Consumo, la de la Sociedad General Española de Médicos Generales y de Familia o el http://www.cdc.gov/spanish que pertenece al gobierno EEUU aunque contiene información en español.
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os expertos advierten que de las 2.000 páginas de Intet que ofrecen información médica, sólo una mína parte de ellas cuentan con una institución médica solvente que las respalde o con unos profesionales identificados y a los que sea fácil acceder. Debido a la extensión de la búsqueda de información sanitaria a través de la red, este fenómeno se ha denominado cibercondría, un trastorno mediante el cual el afectado se deja guiar o sigue un tratamiento indicado en alguna página web. Para ellos la visita al médico sólo buscaría la ratificación del diagnóstico previamente conseguido en la red.










