Si mañana todos los informativos abrieran con este titular, aquel laboratorio farmacéutico capaz de condensar la oxitocina en una sola pastilla se convertiría en el amo y señor de cuánto la industria farmacéutica mueve a su alrededor.
Lo más sorprendente del tema es que esa realidad no parece tan lejana teniendo en cuenta un reciente descubriento.
Prácticamente todos los medios ‘online' y algunas televisiones se han hecho eco de este descubriento que sin duda podría revolucionar completamente las relaciones sociales aunque parece que de momento sus indicaciones irían más relacionadas a tratamientos frente al autismo ya que entre otros efectos, la oxitocina tiene la capacidad de reforzar la memoria social humana.
Sea cual sea el fin últo de la aplicación médica de ‘la hormona del amor' lo cierto es que los estudios realizados en ratones de la pradera demuestran que al neutralizar los efectos de la oxitocina natural que poseen estos anales, su tendencia al cambio de pareja era mucho mayor.
Todavía no hay estudios que concluyan sobre la relación directa entre la oxitocina y las relaciones amorosas humanas aunque varios experentos confirman que la inhalación de esta hormona mejora considerablemente la empatía y aumenta el grado de confianza con otras personas.
La genética también parece un factor tante a la hora de elegir ‘pareja sentental' o de mantener con éxito una relación de pareja es esto que aquellos varones tadores del gen avpr1a (receptor de la vasopresina), tienden a permanecer solteros mientras que en los casos en los que se mantiene el gen estándar las relaciones son más estables.
De cualquier modo si la oxitocina se convierte finalmente en un fármaco al alcance de cualquiera, el trabajo de camareros, heladeros y de los actores de comedias románticas que ayudan a superar las rupturas sententales quedarían relegados a un ‘paro forzoso' la falta de clientes. Quizá sea mejor seguir con el cortejo tradicional.
