No termina el caso Caja Madrid, todavía el presidente de Caja Madrid, Blesa, quema cartuchos frente a presidenta de la Comunidad de Madrid, Aguirre, que quiere echarlo. Pero en las últas horas Blesa intenta que el peso del Ayuntamiento de Madrid, que le es favorable, se mantenga decisivo y no se aplique la nueva ley de cajas de Madrid, promulgada Aguirre. O sea, que no cambie la mayoría actual y no le echen.
Vamos a seguir viendo partido, pero todo es lamentable, la política fuera de lugar y con enredos partidarios inconfesables.
Lo cierto es que se ha enrarecido el ambiente alrededor de las cajas y me dice un directivo de CECA que el tema cansa. En la CECA, territorio pacifico, Caja Madrid es un mal precedente para otras batallas, que no quieren ver repetidas. Si las autonomías empiezan a cambiar las leyes de cajas tenemos carnaval para rato.
Me consta que en la CECA, la asociación de cajas, hay preocupación, ahora la politización, y también la liquidez, aunque ese tema parece ir mejorando.
Ahora que las cajas son objeto continuo de rumores de fusión, lo de Caja Madrid es un molesto ruido de fondo. Necesitan un mercado tranquilo y sereno para seguir trabajando y cubriendo sus necesidades de depósitos .Todas buscan dinero para equilibrar el balance y paz para trabajar.
El Banco de España, el regulador, debería intervenir. Las cajas ahora están preocupadas su balance y si habrá o no fusiones pronto, pero estos espectáculos de bloquear a una entidad, quitar a un presidente y poner a un político, sobran. Los políticos, no estaban en las cajas, las leyes los metieron dentro, en mala hora.
PD: EL FMI , enéso jarro de agua fría, recesión hasta 2010, seremos los últos de Europa en salir de la crisis. Una oración para que se equivoquen.
Miguel Cifuentes, Periodista









