El grupo editorial italiano RCS Mediagroup acaba de anunciar un acuerdo entre Unidad Editorial y el Grupo Bermont para crear una nueva sociedad dedicada a la presión de periódicos llamada Coración Bermont. Un tema que podría pasar desapercibido si no fuese la delicada situación la que atraviesa el sector. Vocento y Prisa ya han puesto en marcha profundas reformas para segregar los departamentos de presión ¿El objetivo de todos? Reducir costes y plantilla en momentos en que todos temen EREs en los medios de Comunicación.
La revolución ya está en marcha. Los medios quieren recortar costes a cualquier precio y han visto en sus plantas de presión la mejor manera de ahorrar puestos de trabajo y recursos en poco tiempo. La prera luz de alarma la dio Vocento que a finales del año pasado acordó con el mismo Grupo Bermont la externalización de las plantas de presión de ABC en Madrid. Un tema que ha obligado a la empresa a reunirse con sindicatos este mes, para acordar el destino de unos 120 trabajadores de Talleres.
Luego vino Prisa que anunció a comienzos de mes que segregaba la actual EL PAIS SL en cuatro empresas, tres de nueva creación. La idea es separar en diferentes empresas a redactores, administración, servicios y publicidad. Prisa ha señalado que las condiciones laborales, así como convenios laborales se mantendrán inalterables en relación a los actuales acuerdos. Algo que los trabajadores no se creen y que han planteado en las negociaciones que se llevan a cabo con la empresa. Una lucha que ha logrado el apoyo de todos los comités de empresa de Prisa.
Y ahora Unidad Editorial. A la nueva Coración Bermont (cuma de Bermont más Unedisa) se le transferirán todas las actividades de presión industrial de Unidad Editorial, editora, entre otras publicaciones, de El Mundo y Marca. La nueva sociedad facturará algo más de 80 millones de euros y estará controlada en un 63% el Grupo Bermont y en el 37% restante Unidad Editorial. El contrato estipula que Coración Bermont prirá las cabeceras de Unidad Editorial durante diez años, además de ofrecer esos mismos servicios a otros editores.
Según indica RCS, esta operación tendrá un pacto positivo de unos 40 millones de euros en la posición financiera neta de Unidad Editorial y supondrá ‘una fuerte racionalización de los procesos productivos'. Evidentemente este anuncio ha despertado todas las alarmas en Unidad Editorial que hace unas semanas anunciaba a sus empleados que se debían reducir unos 30 millones anuales de gastos en salarios o de lo contrario se deberían despedir unos 400 trabajadores. ¿Este será el prer paso?
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