Ante los malos tiempos, renovarse o morir. Airfrance es consciente de la crisis mundial y la caída de servicios aéreos que ello conlleva. Por este motivo el cambio de agen se ha de hacer paulatinamente, conviviendo con el anterior hasta que la renovación sea total. Brandage ha sido la encargada de depurar el logo atendiendo siempre a su identidad nacional, esto es, los colores de la bandera francesa: blanco, azul y rojo.
Sin embargo este cambio no pretende posicionar la marca, que ya está consolidada, sino mostrar la evolución de una aerolínea que está a la últa desde su naciento. Brandage ha querido transtar las experiencias del viaje como algo más que un elemento intangible.
Al unir las palabras Air y France, la compañía afirma su estatuto internacional, siempre preservando sus valores. Este logotipo, abanderado de los tres valores de la marca, es decir, la Excelencia, el Arte de Viajar y el Humanismo, tiene como misión generar confianza y seguridad para los clientes.
La tipografía exclusiva y los detalles dinámicos en rojo presentes en toda la comunicación, le recuerdan al pasajero la excelencia que ofrece Air France en todos sus servicios.
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