Los trastornos digestivos de diversa gravedad son muy habituales en la consulta del pediatra. Según el Dr. GarridoLestache, pediatra y creador del DNI del recién nacido que se expide en las maternidades, 'en el niño, cualquier síntoma, pequeño que sea, nos puede dar la clave del diagnóstico', y es que el propio organismo nos lo dice todo.
Muchas de estas afecciones son pasajeras, las pueden padecer niños de cualquier edad y se solucionan dejando al aparato digestivo casi en reposo. Las patologías habituales en el recién nacido y el lactante son múltiples y variadas: las llamadas funcionales: reflujo gastro esofágico, invaginación intestinal…, y las inflamatorias: apendicitis, colitis, intolerancia al gluten… Sin embargo, las más frecuentes son los cólicos del lactante, pues casi todos los niños los padecen hasta los tres meses y producen diarreas, vómitos, dolores abdominales y falta de apetito. Estos cólicos podrían ocultar otros problemas, que sin duda serían correctamente diagnosticados los pediatras.
Cuando son algo mayores, acuden a la consulta principalmente trastornos alenticios obesidad, anorexia, bulia traumatismos, intoxicaciones alenticias, estreñiento, diarreas o dolores abdominales que pueden ser síntoma de algún proceso inflamatorio agudo en la cavidad abdominal.
También cabe destacar entre las posibles patologías digestivas del niño, las alergias y las intolerancias a ciertos alentos, que producen reacciones adversas en el organismo. La prera medida es, supuesto, retirar esos alentos que sientan mal al niño ya sea alergia o intolerancia y estudiar qué perjudican su organismo. Los tratamientos para curar estas afecciones son lentos y no siempre agradecidos, pero se está avanzando mucho en este campo.
Gracias tanto a la ciencia médica, como al personal sanitario y a las instituciones, actualmente podemos afirmar que la pediatría española está a la altura del resto de países desarrollados: su calidad es excepcional (la mejor expresión sería el transplante de hígado en bebés), y en lo referente a la cantidad, basta con saber que la atención pediátrica está al alcance de todos.