Investido de aires nuevos, tras su participación en las cumbres internacionales de Londres, Kiehl, Estrasburgo, Praga y Ankara, el presidente Zapatero contestó al fin al clamor popular que exigía un golpe de tón para hacer frente a la crisis histórica que sacude a España y al mundo. Sensible al ruido mediático, no dejó terminar la Semana Santa para anunciar el nombramiento de seis nuevos ministros y la destitución de otros tantos, que con la baja del cinegético Bermejo, han sumado siete cambios en los 18 ministerios. Al PP le han parecido insignificantes, pero el Gobierno pretende transmitir fundamentalmente y enca de todo "un cambio de ritmo". Acelerar que el dinero llegue a las familias, a las Pymes y a la industria, es el objetivo del recambio.
Ahora el Presidente Zapatero tiene a todos sus mejores "hombres/mujeres" en el Gobierno. Se ha quedado sin capacidad de maniobra. Con este equipo pone toda la ca en el asador y se la juega hasta el 2012. Hay que estar atentos a la evolución de la crisis. Por su parte la oposición, el Partido Popular tiene dos años para "desgastar al Gobierno", si el signo económico cambia, lo tendrá más difícil para cambiar el signo político.
Inalterablemente y como siempre, el cambio de gabinete, o la crisis de Gobierno, como se suele llamar, no ha satisfecho a todos, o más bien a casi nadie. En tiempos de dificultades económicas, las caras nuevas, y sobre todo si son de mujer, producen incertidumbres. Resquicios de nuestra educación conservadora y tradicional que nos hace confiar más cuando el tón lo lleva un hombre, con aire de sólido viejo profesor, que una enjuta mujer de escasa estatura, con aspecto frágil, como es Elena Espinosa, de sobrada experiencia en la administración del Estado, y al parecer especialista en convertir las normas en hechos de inmediato cumpliento. Pero, el aspecto cuenta.
Bermejo cayó del Gobierno tras una foto publicada con intención un periódico nacional con la que se echó al país entero a la contra. Cuestión de estética. Solbes hacía tiempo que quería reposar sus muy trabajados 66 años en un sillón menos bullicioso que el del Ministerio de Economía y Hacienda y la Vicepresidencia segunda del Gobierno. Demasiada responsabilidad para el calmado economista, más cerca de las tesis de ahorro y contención del déficit público que de las vibrantes medidas de urgencia para solucionar el problema de la cobertura de desempleo, el incremento de la obra pública y el saneamiento de la banca, a base de inyectar dinero a granel. Demasiado veterano y conservador para experentos de vanguardia Siglo XXI. Por eso el cambio, que deja prácticamente la Economía en manos del presidente Zapatero y el ministro Sebastián, ex jefe de la oficina económica de Moncloa, se asemeja más a una arriesgada huida hacía los nuevos tiempos con soluciones de rápida aplicación, tipo Barak Obama, líder de moda, qur es de la misma generación que Zapatero y de un pulcro aspecto muy silar.
Manuel Cháves, más de veinte años al frente de la Comunidad de Andalucía también era cara vieja en la Junta, necesitada de renovación. Le sustituye Juan Antonio Griñán, que ya fue ministro de Felipe González, actualmente consejero muy respetado en Andalucía. Cháves, Secretario General del PSOE y uno de los capitanes del partido, ha sido llamado a Madrid, como Ministro de Administración Territorial que conoce como nadie los entresijos de la financiación autonómica. Siempre exquisito y respetuoso con los presidentes vascos, catalanes, extremeños, canarios o castellanos, en torno a la polémica sobre los estatutos autonómicos y la financiación de las Comunidades. Llevar a Cháves a Madrid ha sido un golpe de efecto que pocos podrán discutir, si acaso criticar criticar, decir que los andaluces se han quedado con un pasmo lo sigiloso y rápido del traslado. De la noche a la mañana. Casi se ha despedido a la francesa.
El gallego naciento y vocación José Blanco fue el que le hizo ganar las elecciones dos veces a Zapatero. Con mano férrea y lengua afilada ha sabido mantener la disciplina en el PSOE de Ferraz (la calle de la sede del PSOE en Madrid). Hace más de un año, nombró Secretaria General de Organización del PSOE a Leire Pajín, una dirigente de las Juventudes Socialistas, diputada Alicante que en pocos años escaló a la Ejecutiva Federal y a sus actuales 34 años, es la máxa responsable del Partido Socialista en Ferraz. Una mujer que ya a los 30 años fue nombrada Secretaria de Cooperación. Ahora Blanco, desde el ministerio de Fomento, tiene encomendada la labor de hacer llegar las actuaciones de su ministerio a las Comunidades.
De momento, hay prevista una reunión entre José Blanco y la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre para el vies 18 de abril, tras las amargas quejas de Aguirre sobre el olvido y abandono al que la anterior ministra de Fomento, Magdalena Álvarez tuvo sometidas las infraestructuras madrileñas. Lo mismo ha sucedido con la Comunidad Valenciana, a quien Blanco ya ha prometido la construcción del tan deseado AVE, para el año 2010.
Trinidad Jénez y Ángeles González Sinde. De la prera, una de las mujeres fuertes de la Ejecutiva de Zapatero, ha tardado casi seis años en llegar al cargo para el que esta predestinada. Dos veces "sacrificada" para disputar la Alcaldía de Madrid al inamovible Alberto Ruiz Gallardón, Trinidad Jénez fue consolada con la Secretaría de Estado para Latinoamérica, mientras se esperaba una baja o crisis donde ser nombrada. Su ministerio, Sanidad, ha tomado además el nombre de Asuntos Sociales. Materias ambas donde el perfil social y político de Trinidad Jénez encajan perfectamente.
De González Sinde, guionista de cine, mujer de lo que se llama la "cultura de la ceja" y hasta ahora directora del Instituto de Cine, poco se sabe a nivel político. Hay opiniones para todos los gustos. Los intelectuales están encantados y si son del mundo del cine, realización, audiovisual, etc, mucho más. Es una entendida y gran guionista para algunos. En cuanto a su sesgo político, nulo, incluso es atípico escuchar su discurso inconexo, deshilado, sin asumirse ante sí misma la tancia que la "profesión política" buye a los suyos. Esa especie de humildad genuina…promete. Aunque no se entiende cómo el presidente Zapatero, de la cuerda internauta "Obamarista" (no olvidemos que gran parte de la campaña del presidente norteamericano utilizó la Red) ha nombrado a una mujer que se ha echado enca a toda la tropa internauta, su beligerancia contra las descargas ilegales en sus tiempos de directora del Instituto de Cine, a favor de la protección de los derechos de autor. Algo discutible política y éticamente, pero ciertamente muy popular.
Angel Gabilondo era prescindible. Con las Universidades descolgadas inexplicablemente del Ministerio de Educación (Mercedes Cabrera), y una clase estudiantil en pie de guerra, protestando "sin causa" ya que la radicalidad con la que se han opuesto los movientos estudiantiles al Plan Bolonia, sólo se entiende desde una falta de información parte del ministerio correspondiente. Gabilondo, como rector de la Universidad Autónoma de Madrid, goza de un amplíso consenso que le reconoce amplia experiencia y reconociento del mundo universitario.
Concha Minguela.
Directora de Gente en Madrid