Ya están todas las cifras sobre la mesa: el presupuesto de la cadena Pública será a partir del próxo curso de 1.200 millones de euros, financiado de la siguiente manera: 500 millones de los presupuestos generales del Estado, 300 millones el canon del 0,9% de los ingresos de explotación de las operadoras de telecomunicaciones, 120 millones del 3% de los ingresos de explotación de las televisiones y el resto con la tasa el uso del espacio radioeléctrico, que ahora se transferirá directamente a la Pública. Un reparto con demasiadas dudas.
Los centajes están claros para el Ejecutivo: las privadas deberán atar el 10% del presupuesto de RTVE, las 'telecos' sufragarán el 24% de los gastos de la pública, el Estado se hará cargo del 45% y el 20% vendrá de la recaudación de la tasa el uso del espacio radioeléctrico. Un reparto que ha dejado contento a pocos y a excepción de las televisiones, que cumplen viejas demandas, el resto de los sectores no ven con buenos ojos la medida.
Las preras en protestar, de momento en privado, han sido las operadoras de telecomunicaciones, que no entienden qué tienen que financiar una televisión pública en una medida que sólo favorece a los operadores privados de televisión. La verdad es que el Gobierno tampoco lo entiende, pero lo cierto es que han apelado a uno de los pocos sectores que en estos momentos tienen liquidez en un marcado coaccionado la fuerte crisis económica mundial.
Las telecos son las únicas que pueden tirar del carro y así lo están haciendo, eso no pueden tolerar que el Ejecutivo abuse de sus facultades pidiéndoles que se hagan cargo de una cuarta parte de los presupuestos de la televisión pública de todos los españoles, nada menos que 300 millones de euros que deberán salir de los ingresos operativos de las empresas que buscan un respiro en medio de la crisis.
Empresas que respiran, a diferencia de las cadenas de televisión que sólo deberán pagar 120 millones de euros, equivalentes al 3% de sus ingresos. Serán los principales beneficiados de los 600 millones de euros en publicidad que deje de recaudar RTVE, pero a cambio sólo deberán entregar 120 millones, el 10% del presupuesto de la Pública. Eso, si es que se respeta este momento, ya que vista la actual situación económica de las empresas y la brusca reducción de sus ingresos publicitarios, vemos difícil que logren reunir estos 120 millones sólo con sus ingresos de este año.
Si hacemos este ejercicio matemático podemos comprobar que en 2008, el 3% de los ingresos netos El Ejecutivo habla de brutos de las dos principales cadenas Antena 3 y Telecinco sólo llegaba a reunir 53 millones de euros, muy justos si consideramos que este año esta cifra podría ser notablemente inferior ¿Qué pasa si no se reúne el dinero? La cifra podrá variar con los años o será fija en el 3% de cualquier tipo de ingresos de explotación? Veremos…
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