La crisis económica provoca que las campañas de los principales partidos ante la cita del 7 de junio sean las preras que no cuentan con las tradicionales caravanas de periodistas.
Esto hará aún menos visible las Europeas.
Los periodistas prefieren esta vez seleccionar los mítines en función de su interés en vez de aceptar los paquetes ofrecidos los distintos partidos. Además de la situación económica, esta decisión responde al menor interés de estas elecciones y a la posibilidad de seguir los actos otras vías, como Intet o la señal de televisión en directo o diferido que facilitan los propios partidos.