Este año se cumplen 30 años de la aprobación de la Ley del Trasplante y 20 años de la creación de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Actualmente 22.000 personas viven gracias a un trasplante, pero cada año otras 4.000 espera poder vivir también gracias al suyo.
Desde la creación de la ONT se han hecho unos 44.862 trasplantes renales en España, y la máxa supervivencia de un trasplante renal en España está en 39 años.
En 1989 hubo en España 550 donantes de órganos, es decir 14,3 millón de población (pmp). La creación de la ONT ha servido para poner en marcha un sistema de coordinación de trasplantes que unido a la solidaridad de la gente nos ha llevado a los 1.577 donantes de órganos actuales que suponen 34,2 pmp. El modelo español se ha convertido en un referente y es itado en prácticamente todos los países del mundo.
Desde la Asociación para la Lucha de Enfermedades Renales (ALCER) se destaca ‘que no hay otro aspecto sanitario o científico en el que España pueda ser considerada líder mundial como lo es en coordinación de trasplantes’.
En 1992 los donantes accidentes de tráfico fueron 358. En el año 2008, la disminución de los accidentes de tráfico ha reducido la cifra a 129.
Al mismo tiempo, gracias a los avances de la medicina, la edad media de los donantes ha pasado de ser de 34,5 años en 1992 a 55,4 años en el 2008, es decir, los donantes de órganos cada vez tienen mayor edad. De hecho, los donantes de órganos mayores de 70 años suponen el 23,4% de los donantes y los mayores de 60 años llegan a ser hasta el 44,3 % de todos los donantes. La edad media más alta de los donantes esta en La Rioja con 65 años y la más baja en Aragón con 48 años. El donante de riñón con mayor edad tenía 89 años.
“Gracias a tí” es el mensaje con el que ALCER celebrará en más de 50 ciudades de España el Día Nacional del Donante, Alejandro Toledo, Presidente de la Federación Nacional de Asociaciones ALCER, ha querido resaltar que “como beneficiarios de las donaciones anónas, queremos destacar la solidaridad de aquellas personas que en vida dejan constancia de su voluntad de ser donantes de órganos y a aquellos familiares y amigos que consienten que sus órganos den vida a quienes más lo necesitan’