El número de coches en 1965 es 14 veces menor de los que actualmente circulan las carreteras españolas, donde rondamos los casi 31 millones de vehículos. A pesar de contar con más coches, la cifra de fallecidos es silar a la de 1965. Este descenso de más del 90% en comparación con 1959 se debe en parte al recorrido y las labores plantadas desde la Dirección General de Tráfico durante estos cincuenta años de existencia. La obligatoriedad del uso del cinturón de seguridad y el casco, así como el carné puntos y la últa reforma del Código Penal son algunas de las contribuciones a la seguridad vial.
En 1959 se creo la Dirección General de Tráfico (DGT). Por entonces, murieron en las carreteras españolas un total de 1678 personas, es decir, 1.226 personas cada millón de vehículos matriculados, mientras que en 2008 esta proción no ha llegado al centenar. Además, hay que destacar que en 1959 había un total de 859.152 vehículos, hoy es de casi 31 millones. El número de conductores era de 2.235.192 y hoy es de casi 26 millones. Así lo demuestran los datos ofrecidos la revista ‘Tráfico y Seguridad Vial’ que edita la DGT.
Por 1960 el número de motos duplicaba al de turismos y las vías urbanas registraban más accidentes de tráfico que las carreteras. Sin embargo, el naciento de la DGT no significó un descenso espectacular en el número de fallecidos. De hecho, en los años 60 se registró un incremento de accidentes y de murtos. En la prera década se triplicó debido al aumento del parque automovilístico, las deficiencias técnicas y la seguridad que entonces contaban los vehículos y las carreteras.
Lo mismo sucedió a lo largo de los años 70. De hecho, en 1978 se registró la cifra récord de 116.017 accidentes y 5.359 muertos. A pesar de todo, es en esta época cuando se planta y modifican los límites de velocidad genéricos y se convierte en obligatorio el uso del casco y el cinturón de seguridad. Tal y como señala esta misma revista, de 1980 a 1985m ‘los accidentes se convierten en un objetivo político y social’ y se aprueba el prer Plan Nacional de Seguridad Vial. Finalmente se consigue un descenso de la mortalidad, sobre todo en 1982. Sin embargo, en zona urbana los accidentes aumentan un 13%. Hay que señalar la alta siniestralidad del verano de 1985. Durante estos meses se mataron el 40% de todas las victas mortales de carretera del año. De hecho, esta década finaliza como el peor año del siglo, ya que en 1989 murieron 7.188 personas y se contabilizaron 176.599 víctas.
Durante los años 90 se producen cambios legislativos como la Ley de Tráfico, la Reforma del Reglamento de Circulación y el Reglamento Sancionador. Según la revista ‘Tráfico y Seguridad Vial’, se produce una curva descendente hasta 1995. Y es durante este tiempo se aumenta la cuantía de las multas. Además, a partir de 1992, el uso del casco y el cinturón es obligatorio también en ciudad. Asismo, las vías de alta capacidad pasan de 3.500 kilómetros en los años 80 a 6.497 en 1994.
Finalmente llegamos al año 2000. A principios del siglo XXI, España sigue siendo uno de los países de la Unión Europea con mayor siniestralidad. En 2006 se pone en marcha el carné puntos y el número de muertos desciende un 10% respecto al año anterior. En 2008 se producen 3.082 muertos, 616 de ellos en zona urbana y 2.466 en carretera. La mortalidad desciende un 12% respecto a 2007 y nos situamos a cifras silares a 1965 a pesar de contar con 14 veces más coches en nuestras carreteras. La reforma del Código Penal contribuye igualmente a esta reducción y a fecha de 5 de julio de 2009 llevamos contabilizados 964 muertos, 119 menos que hasta la misma fecha del año pasado, un 11% menos.
España ha conseguido reducir los fallecidos en las carreteras en un 40% entre 2003 y 2008, situándose en el cuarto país de la Unión Europea que más ha reducido sus muertos y todo ello resultado de cincuenta años de trabajo en pro de la seguridad vial. ¿El próxo reto? reducir en otro 40% las muertes en accidentes de tráfico entre el periodo 2010 y 2020.
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