Cuando todo falla, incluso el ejercicio y la dieta, hay que recurrir a la cirugía. Seguro que hay muchas alternativas para conseguir un maravilloso vientre plano pero me decido contarles en que consiste la abdominoplastia.
El estiramiento del abdomen se realiza principalmente para quitar el exceso de piel y grasa acumulada en la parte baja del abdomen que no se corrige habitualmente mediante ejercicio y dieta. Asismo tras los embarazos o pérdidas de peso notables, los músculos abdominales se debilitan y la piel de esta zona se torna fláccida. La técnica más común utiliza una incisión transversal a lo largo de la parte baja del abdomen, enca de la zona pubiana. Otra incisión es necesaria para liberar el ombligo de la piel de alrededor. La piel se separa de la pared abdominal y se eleva hasta el nivel de la pared costal para poder estirarla convenientemente. Al mismo tiempo se realiza una reaproxación de los músculos abdominales, que suelen estar distendidos, consiguiendo un reforzamiento de la pared abdominal y un estrechamiento del abdomen a nivel de la cintura. El exceso de piel se extirpa y se abre un pequeño orificio para extraer el ombligo en su nueva localización, que coincide con la anterior. Los puntos suelen ser internos y reabsorbibles lo que no requieren quitarse habitualmente.
Después de la cirugía hay molestias y tensión que son fácilmente controlables con la medicación adecuada. El paciente permanece los preros días con las caderas flexionadas para evitar tensión en el área abdominal. El vendaje inicial consiste normalmente en una faja adecuada que mantenga la compresión. Las cicatrices tienden a ser permanentes, lo que se procura dejarlas en zonas ocultas el biquini. Su grado de mejoría dependerá de la cicatrización individual del paciente. La maduración y aplanamiento de las cicatrices se culmina entre los cinco o seis meses. El paciente debe evitar actividades rutinarias durante tres o cuatro semanas, si bien estos plazos dependerán de la evolución de cada caso.