Los operadores de telefonía móvil no saben parar la caída del mercado español, y los datos de la CMT indican que su facturación y el tráfico han vuelto a cifras realizadas antes de 2006. En el prer trestre de 2009, y de forma interanual, los ingresos han caído un 5%, el tráfico un 0,4%, y el ingreso medio minuto un 3,2%. Igual suerte han corrido los mensajes SMS, y solo se ha salvado la banda ancha móvil, que mantiene su empuje gracias a un creciento constante y que nunca retrocede. La facturación de datos todavía no puede salvar el resultado global que solo supone el 8,9% del mercado, pero este centaje se ha doblado en casi dos años. El final de la crisis acelerará su ritmo de creciento, dados los esfuerzos realizados los operadores para lanzar servicios y ofertas de conexión a la Intet móvil.
El mercado de la telefonía fija ha repetido la caída del móvil, pero de forma corregida y aumentada. Los ingresos servicios minoristas de telefonía fija bajaron un 9,9%, y un 16% de forma interanual. Como en el móvil, los ingresos de los servicios de Intet mantienen su creciento, lo hicieron en un 4,1% sobre los ingresos realizados en el prer trestre de 2008. La diferencia con el móvil es que la facturación de acceso a la Intet fija tiene vaivenes. La realizada en el prer trestre de 2009 es inferior a las realizadas en el segundo y en el cuarto trestres de 2008, en ello influye el que es un mercado más maduro. Los datos de la CMT añaden que el 70% de las conexiones fijas eran de tres a 10 megas, y otro 11,6% superaba los 10 megas. Solo un 0,5% de las conexiones españolas tiene menos de un mega.
Los ingresos del sector audiovisual, junto con los de servicios minoristas de telefonía fija, encabezan la negra lista de pérdida de ingresos. En este fatídico prer trestre de 2009 retrocedieron un 13,5% sobre el mismo periodo del año anterior. La televisión de pago perdió una parte de los abonados que tenía al cerrar 2008, volviendo casi al número que tenía hace un año. Han perdido abonados la televisión de cable y la de satélite, pero no la IPTV, o sea los servicios de programas empaquetados vendidos los operadores de telecomunicaciones a través de sus redes, que mantiene un ritmo constante de creciento. El número de clientes de la televisión móvil también ha crecido, aunque no lo hizo de de forma constante en el pasado año.
Los ingresos publicitarios de televisión cayeron un 23,5%, hasta quedar en 630 millones de euros. Han caído las cuotas TV de pago, situándose en la cifra más baja de cualquiera de los trestres del año anterior. Los ingresos del pago pro visión han aumentado levemente, pero solo son las dos terceras partes de los realizados hace un año. Los ingresos publicitarios de las cadenas privadas no levantan cabeza, a pesar de la caída de la facturación de la televisión pública, obligada posición gubernamental en el caso de las estatales. La próxa aprobación de la Ley de Financiación de RTVE con la supresión total de la publicidad favorecerá a las cadenas privadas. Habrá que ver si también lo hará en las que no quiebran gracias al apoyo gubernamental.
SUSANA BLÁZQUEZ, PERIODISTA