A un lado los defensores del PP, pase lo que pase. Al otro, los defensores del PSOE, los mismos, los de siempre, como los otros. Esto de los programas debate, o tertulias, o comentarios de todo tipo y pelaje son elementos para distraer al personal llevando lo más presentable de cada casa. ¿Para qué sirven debates en los que la mitad de la mesa es de un partido y la otra del contrario? ¿Refleja realmente libertad de expresión y opinión? ¿Qué sentido tiene que debatan si ya sabemos lo que va a decir cada uno?
Los periodistas deben ser la mañana de derechas, a mediodía de izquierdas, y a la hora de recogerse, de centro. Por favor dejen en las televisiones que brote la libertad de verdad… Ni una idea, ni un argumento, ni un pensamiento… Todo igual. ¡Qué pena!
La actitud de Isabel Durán y Alfonso Rojo, en la Noria, fue surrealista y vergonzante, al igual que en otros debates lo ha sido la del bando contrario. Los abucheos del público no fueron una falta de respeto, tal y como sugería Durán, sino una muestra del hartazgo que producen la falta de argumentos y el seguidismo, pase lo que pase…
pedro aparicio pérez
director de prnoticias.com