Las vacaciones no están siendo tranquilas para los medio. Si julio ya fue complicado, agosto está siendo aún peor. La diferencia es que este mes la mayoría de las redacciones se encuentra con sus equipos suplentes y plagados de jóvenes becarios. Es ello que más de algún jefe ha debido interrumpir sus vacaciones o hacer llamadas de últa hora. Un verano diferente.
Los atentados de eta en Palma de Mallorca, la muerte de Daniel Jarque, las acusaciones de espionaje del PP contra el Gobierno, los coletazos del Gürtell, las inundaciones, etc.. Temas que abrirían informativos y periódicos durante cualquier época del año, pero que esta vez se han producido todos juntos en agosto, un mes en que tradicionalmente todas las redacciones se encuentran en mínos y con todos sus equipos titulares prácticamente de vacaciones.
Este año no ha sido la excepción, aunque con algunas reticencias. Hemos podido saber que más de algún director o redactor jefe ha debido interrumpir sus vacaciones o hacer llamadas a Madrid, para apagar estos fuegos informativos. La verdad que es los suplentes han hecho lo que han podido, pero hay temas, especialmente en los políticos, en que las fuentes sólo hablan con determinados periodistas, y ellos han debido arrar el hombro en esta otunidad.
Por lo demás, los ‘directores suplentes’ se han mantenido en permanente contacto con sus ‘jefes’, quienes a su pesar han coordinado el trabajo en temas delicados, en especial en relación a las investigaciones supuesta corrupción en diferentes frentes de la geografía española. Llevamos once días duros en los medios de Comunicación y los pocos periodistas que quedan, ya piden que llegue septiembre.
Seguiremos Informando…