Según informa la edición digital del periódico de medicina respiratoria Thorax, un estudio del Northern California Cancer Center, en Estados Unidos, ha demostrado que mujeres con obesidad abdominal tienen una mayor probabilidad de padecer asma. El estudio refleja que el riesgo de que estas mujeres padezcan esta afección es alto, incluso en las que no padecen sobrepeso.
El estudio, uno de los mayores realizados hasta el momento, con una muestra de más de 88.000 mujeres, ha revelado que la incidencia de asma entre las mujeres con una cintura de más de 88 centímetros aumenta en un 37 ciento respecto a aquellas con una cintura de menor longitud.
Esta conclusión ha sido producto de un estudio que en principio estaba destinado a examinar los factores del cáncer de mama en las mujeres, y no para determinar qué la ubicación de la grasa coral en determinadas partes de cuerpo, como en este caso la cintura, podría desempeñar un papel en el desarrollo de asma.
En este sentido, diversos estudios han demostrado que la grasa visceral, la que se acumula dentro del abdomen y recubre el intestino y otros órganos adyacentes es biológicamente la más activa. Además se ha relacionado con otras patologías como la diabetes y enfermedades cardiovasculares’, ha afirmado el autor del estudio, Julie Von Behren, investigador asociado en el norte de California Cancer Center en declaraciones a Thorax.
Otro de los datos que se desprende del estudio es la incidencia de asma en las mujeres con sobrepeso. Éstas tienen más del doble de posibilidades de padecer asma que una mujer con un peso medio, y más del triple en mujeres con obesidad extrema.
Respecto a las causas de esta asociación, los expertos aún no han sabido responder con exactitud a qué factores se debe. ‘Aunque no sepamos con exactitud las causas de esta relación, estos datos no hacen más que dar una nueva razón para mantener un peso adecuado‘, declaró el autor del estudio.
En los últos años, más de 20 estudios epidemiológicos, tanto en adultos como en niños, han confirmado la existencia de esta conexión entre la obesidad y la incidencia del asma. La relación es evidente, principalmente, en el género femenino e independientemente de la dieta, la actividad física o la condición alérgica. Y esta influencia de la obesidad ocurre principalmente con el asma y con la hiperreactividad bronquial, pero no con otras enfermedades alérgicas.