El presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, ha afirmado que las cuatro ciudades que compiten la organización de los Juegos Olímpicos de 2016, a saber, Madrid, Chicago, Tokio y Río de Janeiro, ‘están muy igualadas’.
En este sentido, Blanco ha augurado que la elección se puede decidir ‘ uno o dos votos’ de diferencia, de los aproxadamente cien que se emitirán. Unos votos que ‘no se pueden controlar’, ha dicho, convencido de que la composición heterogénea de los miembros que conforman la Asamblea del máxo organismo olímpico hace previsible el resultado de la votación.
En el curso de la Jornada ‘El dete: ejercicio físico, ocio y espectáculo. La alta competición y los Juegos Olímpicos’, organizada al alón el COE y la Universidad Camilo José Cela, Blanco ha querido mostrarse optista, pese a lo cual ha reconocido que la elección será complicada, constituyendo un ‘problema’ la prera votación, no la últa, ya que los sufragios iniciales suelen estar muy repartidos.
En este contexto, el presidente del Comité Olímpico Español ha afirmado que el proyecto madrileño es el mejor de los que concurren a la carrera olímpica y que las cuatro ‘pegas’ puestas la Comisión de Evaluación del COI ‘ya están resueltas’, poniendo como ejemplo la adaptación de la legislación española al código antidopaje de la WADA. Por lo demás, ha dicho que las reticencias no afectan a la estructura básica de la candidatura, en la que sigue confiando. ‘Vamos a ganar, pero hay que respetar’ a las otras ciudades aspirantes, han sido sus palabras.
Menos convencido que Blanco sobre las posibilidades de Madrid 2016 se ha mostrado el ex secretario de Estado para el Dete y actual rector de la UCJC, Rafael Cortés Elvira, quien ha afirmado que ‘no es fácil, ni sencillo, y tener el mejor proyecto puede no ser suficiente’.
Cortés ha asegurado que hay que ser ‘cautos’ con respecto al resultado de las votaciones, en un contexto en el que los representantes del mundo anglosajón han ganado posiciones en el COI desde la llegada a la presidencia de Jacques Rogge. En este punto, ha coincidido con el parecer del presidente de honor del máxo organismo olímpico, Juan Antonio Samaranch, que apostó ayer ser pesista, a fin de reaccionar con alegría en el caso de que Madrid sea elegida sede de los Juegos.
Cortés ha recordado que de cara a la votación de 1986, en la que se eligió a Barcelona ciudad organizadora de la edición de 1992, se hizo un trabajo ‘soterrado’ con los miembros del COI que ahora sería preciso reeditar, si bien en la actualidad es más difícil, han dicho los ponentes, que la influencia de España en dicho organismo ha decrecido.
De las intervenciones del resto de los ponentes, ha destacado igualmente la del director general de Detes del Ayuntamiento de Madrid y de Madrid 2016, Miguel de la Villa. Éste ha dicho que ‘perder no sería un caos’, ya que la candidatura ya ha generado beneficios para la capital.
En cuanto al legado que los Juegos dejarían para la ciudad española, ha afirmado que no sería tanto físico, ya que no habría que construir muchas infraestructuras nuevas en el futuro, cuanto cultural, social, detivo, económico y medioambiental.
De la Villa ha asegurado que los Juegos Olímpicos constituyen la ‘mejor otunidad’ para una ciudad para dar un salto cualitativo en su estrategia de creciento y ha reconocido que la designación como sede atraería inversiones.
Encargado de clausurar la Jornada ha estado el director de la Cátedra Olímpica Marqués de Samaranch de la UCJC, Rafael Ansón, quien ha deseado la mejor de las suertes a la candidatura madrileña de cara a la trascendental votación del 2 de octubre.
Seguiremos informando…