Por muchos años que uno cumpla, mucha experiencia que se vaya acumulando, nunca se agota la capacidad de sorpresa ante las cotas de incompetencia a la que pueden llegar las personas y más, si están revestidas de algún tipo de autoridad, sobre todo, cuando ésta no es merecida. Hoy, el mejor ejemplo se escenifica en el caso PSOE Lavinia AEMET (Agencia Estatal de Meteorología), que tras la tregua informativa de la últa semana, hay que volver a la carga ya que la información que prnoticias.com ha conocido estos días deja a las claras, una vez más, que el grado de estulticia supina no tiene límites, hasta el punto de que este asunto va camino de convertirse en la trama “Gürtell” de los socialistas.
¿Por qué digo esto? Por que prnoticias.com ya sabe, de fuentes del Ministerio de Medio Ambiente, Marino, etc., quién es el empecinado, el tozudo, el de “yo en el error pero firme” en todo este “merdé”. Ese personaje que está empujando a la ruina al Presidente de la AEMET, encaminándole a hacer bueno su propio apellido, “Cadarso (L)”, es el insigne Presidente de la Mesa de Contratación de este concurso, D. Justo Escobar Pérez, a la sazón Jefe del Área de Gestión Económico Financiera de la AEMET. Es éste individuo quién está ejerciendo de “correa” de transmisión entre los intereses superiores que presionan desde arriba para dar el concurso a Lavinia, al elevar al Presidente de la AEMET un confuso informe para salir del hoyo en que se ha metido solito.
Lo más gordo de ese informe, según nos cuentan desde el Ministerio, es que “Don Justo” reconoce a su jefe que aquí se ha metido la pata hasta el fondo. Que, además de otras irregularidades, hay una ilegalidad de procediento que ha dejado en indefensión a una empresa (la que viene prestando desde hace dos meses el servicio sin cobrar), y que para salir del embrollo hay dos opciones, a cual peor. Una, tirar para adelante y consumar la cacicada adjudicando el concurso a Lavinia. Y dos, retrotraer el expediente administrativo (después de haberse saltado todos los plazos legales) al principio del concurso. ¡Kafquiano! Dicho de otro modo, que “Don Justo” (olvidándose del valor sbólico de su propio nombre) propone a su jefe que, cómo la hemos “cagado” (en realidad debería decir: cómo la he “cagado”), tiramos ya para adelante o bien, hacemos borrón y cuenta nueva y volvemos al principio. Esto es, nos olvidamos de todo, cómo si no hubiera pasado nada, lo que confirma el grado de la ignominia, raya en un infantilismo inexplicable. En resumen, nada de racionalidad, y nada de devolver a la legalidad, la dignidad y la tranquilidad a la AEMET otorgando el contrato a CDA, para cuyos trabajadores no hay conmiseración alguna.
Menos mal que el Presidente de la Agencia no se fía y ha pedido un informe jurídico a la abogacía del Estado del Ministerio. Informe que ya obra en su poder y que recoge a las claras los errores aquí cometidos y que deberían hacer ver al Sr. Cadarso (L) que sólo hay una salida honrosa y digna a todo esto. Salida que pasa CDA, con la que en nueve años no ha habido un sólo problema. Hoy, sin embargo, esos seis trabajadores “están muertos”, según me dicen en el Ministerio, donde tampoco se explican qué narices hay que dar éste concurso a Lavinia. Debe haber intereses muy altos, me comentan. Entre tanto, Lavinia sigue a lo suyo. Así, hace quince días se llevó a dedo otro concurso; en este caso, para gestionar los contenidos informativos de la televisión del Ayuntamiento socialista de Sevilla, 500.000 €, con el escándalo subsiguiente. ¿Sospechoso, no? Irá ahora Lavinia al asalto de Andalucía? ¡Seguro!
Pedro Aparicio Pérez
Director de prnoticias.com
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