Quemada en la hoguera de las vanidades la ministra Chacón, con grandes alharacas parte de De la Vega, que como el perro del hortelano ni come ni deja comer, ya sólo quedan dos candidatos para suceder a Zapatero en las próxas elecciones: Alfredo Pérez Rubalcaba y Pepe Blanco. Bueno en realidad uno, el segundo, que el propio Presidente se la tiene jurada al prero su buen rollito con el Grupo Prisa y su escasa plicación con el Ejecutivo a la hora de defenderse ante la opinión pública en momentos como estos. De momento, Blanco ya está usando su gran ventaja para ir ganando apoyos incondicionales: el talonario para conceder contratos de Obra Pública. Y ahí no tiene rival. Florentino y Villar Mir son, de momento, dos de los convencidos de las enormes ventajas que presenta el candidato Pepiño.
PEPIÑO, SUCESOR DE ZP
