El Sr Trichet, el capo del Banco Central Europeo, ha dicho que Europa está ya creciendo, hay que ir pensando en retirar los estímulos públicos a la economía. Como habla como un cardenal, sibilino, hay que interpretar que la crisis ha pasado, y que este segundo semestre del año hay ya signos claros de creciento en la Eurozona.
Le han preguntado España, país doliente, y Trichet ha salido peteneras diciendo que no habla de ningún país y que “todos los países deben cumplir el Pacto de Estabilidad”.
Eso significa que el presidente Rodríguez y su Gobierno deben atarse los machos y reducir el déficit público y la deuda pública en 2012 a los niveles del pacto: no más del 3% de déficit y no más del 60% de deuda pública respecto al PIB. El comentario del banquero europeo no debe gustar nada en Moncloa, el presidente Rodríguez trata de aplazar el ajuste un año, hasta 2013.
Con Europa oliendo ya la bonanza, el banquero Trichet advierte que las inyecciones de liquidez del BCE a los bancos, a plazo de un año, se retirarán en 2010. Eso significa que la liquidez dineraria de que han gozado los bancos españoles se va a poner dura, van a tener que buscarse la vida con emisiones de deuda y ofreciendo a los ahorradores españoles más su dinero.
La buena noticia es que los tipos de interés en Europa van a seguir al 1% durante unos meses, mientras la inflación no asome la oreja, algo que los expertos esperan para finales de este año.
Mal asunto para España, si vuelven a subir los precios (hoy dormidos y hundidos) el BCE tendrá la tentación de subir los tipos de interés. Eso va a encarecer las emisiones de deuda del Reino de España para financiar el fastuoso gasto público actual. O sea, vamos a deber más el año próxo y a tipos de interés más caros. Fantástico para nuestros bolsillos y el de nuestro nietos.
PD) Esto a Gallardón no le preocupa nada. Es el alcalde más endeudado de España (mas de 6.000 millones de euros), el que peor paga a sus proveedores (a 730 días), el que más ha subido los puestos, más de un 30%, el que más multa y embarga a sus ciudadanos, saltándose la ley y los procedientos legales de notificación. Y ahí lo tienen, con una intención de voto excelente. No la mía, antes me corto la mano que votar a Gallardón, el Olímpico Faraón.
Estrambote: la Comunidad de Madrid le ha sacado los colores a Gallardón. Le reprocha tener 1.000 cargos de libre disposición, un ejército a su servicio, que pagan los madrileños.
Por cierto, ¿qué piensan del alcalde los madrileños al saber todas estas cosas?, ¿van a seguir votándole?, ¿son masoquistas?.
Miguel Cifuentes. Periodista.