Bajo el objetivo de normalizar la vida de estos ciudadanos, el Programa para la Acogida y la Integración de Inmigrantes de Extremadura ha ayudado a un grupo de rumanos a obtener el carné de conducir.
El concejal de Servicios Sociales, Juan Bravo, ha señalado que tener el carné de conducir es una necesidad para una mejora en la vida cotidiana. Y es que de esta forma tienen mayores facilidades para encontrar un puesto de trabajo. Debemos tener en cuenta que el colectivo de inmigrantes de habla no hispana encuentra muchas dificultades para obtener el carné de conducir, especialmente, la barrera lingüística.
Ha sido precisamente el colectivo rumano el artífice de esta idea que, teniendo en cuenta las normas vigentes, se encargó de solicitar ayuda lingüística para una mejor comprensión de la parte teórica en las autoescuelas.
Posteriormente, se ha ampliado esta propuesta a todos los colectivos de inmigrantes que lo han solicitado, contando con la aceptación de las autoescuelas para llevar a cabo este proyecto.